LA ADOLESCENCIA

Complicada edad

Ser adolescente es sinónimo de ser rebelde; es muy común que las personas que se encuentran en este grupo de edad expresen frases como: “es que nadie me entiende”, “mis papás son mis enemigos”, “todos me fastidian”, entre otras más, y esto resulta natural puesto que es una gran transición: dejan de ser niños para convertirse en jóvenes y posteriormente en adultos.

 Se genera un problema difícil de resolver, un choque de poderes entre los padres y los hijos que se sienten adultos, independientes y capaces de tomar sus propias decisiones, pero que aún dependen económicamente de sus padres, por lo que deben seguir cumpliendo las normas impuestas por ellos.

Aunque sean ya adolescentes, desde muy pequeños es importante fomentar el diálogo abierto con los hijos y generar en ellos confianza en nosotros. Será muy importante que aprendamos a escuchar sin juzgar, y dar nuestras opiniones a modo de consejo, evitando tonos imperativos. Lo que sembramos en la infancia, lo cosecharemos en su adolescencia y adultez.

Frente a esta situación, los padres inevitablemente se sienten apenados, aun cuando este tema es tan viejo como el origen del mundo. A una cierta edad, todos los adolescentes pierden el respeto y se vuelven reservados. Los padres ya no importan y es la opinión del grupo la que prevalece. Esta es una etapa normal del desarrollo de los chicos, pero para los grandes es una prueba muy seria en la cual está en juego su éxito en la crianza.

Los padres generalmente olvidan un tema fundamental cuando comparten con sus hijos: la seguridad les da confianza. Si un chico quiere compartir algo que considera importante, uno no debe abusar de dicha confianza y dar un sermón.

Cuando un chico está en la pre adolescencia, se siente inmerso en un mundo enorme en el cual debe encontrar su propio lugar. Confiará en los adultos con criterio selectivo, no en todos, y más aún en los del círculo familiar, cuando hay relaciones sanas y confiables. En esta etapa, el adolescente necesita mucho espacio privado: ya dejó de “ser de los padres”. Es un ser independiente. Necesita el mismo espacio personal y la privacidad de los adultos. Sus límites personales son los mismos que los tuyos: las pertenencias privadas, diarios, correspondencia, incluyendo el email, SMS, todo esto es intocable.

Lo cierto es que si el chico fue educado adecuadamente desde el comienzo, si ve reflejado en sus ojos que los valores familiares continúan manteniendo su encanto y su autoridad, si ama y respeta a sus padres, las tentaciones morales probablemente no arruinen estos cimientos. Los padres no pueden vivir la vida de sus hijos por ellos, solo pueden ofrecerles su amor y apoyo. Es necesario que los niños cometan errores, y que enfrenten las consecuencias.

Pero esto no ocurre de la noche a la mañana en una situación normal: durante un largo tiempo el niño expresa señales de angustia; el secreto se basa en estar atentos para interpretarlas. Algunos exteriorizan su tristeza; otros expresan su agresión hacia adentro. Los sentimientos de culpa y depresión no se ven inmediatamente: el chico se refugia en su habitación, y demuestra que no está bien expresándolo con malos modales; se lo ve triste y puede llegar a tener problemas con la comida y el sueño. Frente a situaciones como estas, hay que tener mucho tacto y acercarse delicadamente. Es muy común que, en estos casos, se necesite ayuda profesional.

Quizá, detrás de aquella puerta cerrada, suceda algo diferente: nuestros hijos, tan mimados y queridos, el niño debe estar seguro de que sus padres van a entender, apoyar, y no lastimar o dañar.

Hay que abstenerse de dar sermones inapropiados, y evitar insultarlos; habla con ellos por la simple razón de que te da placer conversar. Cuéntale tus experiencias y dale tu opinión directamente. La sinceridad se responde con sinceridad. Y cuando tu hijo comience a contarte algo, silencia tu lengua, no consideres que sabes más.

¿los adolescentes odian a sus padres?

Esa es la sensación que tenemos las madres y padres de chicos de 13 a 24 años (o algo más): que ese amorcito, esa ternurita que nos llenaba de alegría, ahora nos responde con gruñidos, desplantes, maltrato y rebeldía sin fin.
No queremos enemistarnos definitivamente con ellos, entonces toleramos desplantes y malos modos …y acabamos viviendo con el enemigo.
Los adolescentes siempre fueron iguales, y hasta los antiguos romanos comentaban en sus escritos acerca de la “juventud perdida” y la pérdida de valores y moral de los jóvenes. Esto siempre ha sido así, está en su naturaleza y generalmente esto cambia a medida que maduran.
Lo que sucede en la vida es que la gente no anda feliz, protegida y obediente hasta los 18 y de golpe, en la mayoría de edad, se convierten en adultos independientes y responsables.

En la pubertad, a todos les toca un tiempo en que quisieran que este cambio sea mágico y no lo es. Entonces, van juntando resentimiento por no lograrlo, saber que aún dependen de los padres, tener que rendir cuentas de adonde van y a que hora regresan, qué ropa deberían usar, qué aspecto debería tener su cuarto, qué deberían comer, etc .

Por supuesto detestan ver las pruebas cotidianas de que no se las arreglan solos al 100%, y esa bronca irá dirigida directamente a quienes les prueban que aún necesitan ayuda: los padres.
” Le doy todo lo que necesita y nada le alcanza, ni siquiera se alegra de que le regale algo extra”, se quejan los padres.

En primer lugar, los padres le dieron todo toda la vida, y es lo natural y ellos, aun a los 18, no creen que sea algo que haya que agradecer. Después de todo, son los que heredarán a los padres: todo lo que hoy tienen los padres les corresponde por derecho, así lo viven ellos. Los padres recuerdan su vida, cómo era antes de tener hijos, y conocen la diferencia entre gastar todo en sí mismos, y gastar todo en los hijos.

Tus hijos no tienen recuerdo de que algo así haya sucedido jamás en la historia : todo lo que saben es que merecen TODO, porque siempre ha sido así. No recuerdan una etapa en la que sus necesidades no hayan sido satisfechas al instante. No están capacitados para apreciar un celular nuevo, un par de zapatillas caras, ni siquiera que les regales un auto.

La tarea de los padres es lograr que niños consentidos y perpetuamente satisfechos, vayan descubriendo el valor del esfuerzo, que tienen que ganarse las cosas, que ya no les vendrán de arriba, como cuando eran niños … Darles cosas para ” calmarlos” no evitará que se pongan rebeldes.
Si te mantienes FIRME en esta enseñanza, un día, ya maduros, se darán cuneta de lo que les has enseñado, y podrán dejar de odiarte por depender de ti, empezando a apreciar lo que has hecho tratando de que aprendan a bastarse solos.

Cuando yo tenia catorce años, mi padre era tan ignorante que  apenas podía tolerar su presencia cerca de mí.  Cuando cumplí veintiún años, estaba impresionado de ver todo lo que mi padre había aprendido en solo siete años.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

SI TE CAES…TE LEVANTAS

No querer es no poder

No olvides que eres un aristócrata, un príncipe, porque eres hijo del rey del universo. Solo tienes que darte cuenta. Recuerda que Jesús decía: “al pan lo trae la verdad y todo lo que necesitas”. Entonces no hay límites, tú decides a dónde quieres llegar y ésto con la alegría que abre todas las puertas porque, para Dios, siempre somos niños. La vida es un juego maravilloso, un juego que incluye al todo y a todos.

¡Levántate y anda!…

Estás hecho a semejanza de Dios, entonces puedes recrear todo… Ya hay demasiados mártires, necesitamos héroes. Yo te acompaño como te acompañarán todos los que se animan a vivir mejor y que terminan favoreciendo a toda la humanidad, esa grandiosa empresa a la que pertenecemos todos

Camina tranquilo

Que no te confundan los noticieros. El bien es mayoría. Que no te distraigan de tu tarea que es alcanzar la plenitud. Nada como vivir en uno mismo. Solo así, puedes sentirte en casa como en cualquier parte, entonces nada es lejos ni ajeno. Si cada uno fuera cada cual, la sociedad sería una orquesta enriquecida por todos los sonidos, por todas las voces. Una grandiosa armonía de individuos. La sinfonía donde todos aportan su voz. Una partitura escrita para cada uno de los instrumentos, es decir, una partitura respetada por todos.

Nada es para siempre

Debemos estar atentos, listos para el cambio, para toda circunstancia, porque la vida es como es, no como debería ser. Todo nos fue dado, por lo tanto, nada nos pertenece; solo queda gozar lo creado y cuidarlo para el que vendrá, que es una continuación nuestra como nosotros somos continuadores de nuestros padres, de nuestros abuelos, de nuestros bisabuelos y así hasta Adán, el rojo Adán, como le gustaba decir a Borges, quien cometió el peor de los pecados… No fue feliz: se sentía perseguido por la sombra de haber sido un desdichado

El primer dato de sabiduría es saber quién es el que sabe. El segundo, estar con lo amado ya que nos hace más brillantes al estar más atentos y rendimos más. El AMOR nos adorna de tal manera que enamoramos a todos.

Está permitido que te caigas pero no que te quedes en el suelo. En este momento, la sociedad está detenida por una congestión del tránsito que ya es desmesurado porque las ciudades ya son desmesuradas. Tal vez dejemos de pensar para cambiar todas las ideas y comenzar de nuevo.

Los que preguntan avanzan, los que no preguntan se quedan; mueren porque la vida es movimiento. Todo se recrea a cada instante; hay que estar atento.

No te engañes

Entonces nadie te engañará. Firme pero abierto al mundo, atento a las propuestas de la vida. Predica las virtudes pero no calles las verdades. Nunca te arrepentirás de haberte animado y nunca te perdonarás no haberlo hecho. Además, no tienes nada que perder porque ni una sola de tus orejas es obra tuya. No te preocupes por tu futuro. Al final del camino no te espera la cima de la montaña, sino la paz del valle. A nadie tienes que rendir cuentas como a nadie tienes que explicar nada. No debes agotarte en las vanas áreas de querer convencer y gustar. Lo importante es que estés convencido y te guste lo que haces. Y si tienes un gran sueño, tienes que estar dispuesto a un gran esfuerzo para concretar porque solo lo grande alcanza lo grande. Si estudias superficialmente, aprenderás superficialmente. Si vives por la mitad, solo conocerás la mitad de la vida. Si tienes la cabeza dividida, verás al mundo dividido. Si trabajas por obligación, serás un desocupado, un desdichado más. Si tienes miedo, no conocerás al AMOR que es valentía.

No estás deprimido, estás distraído del presente donde sucede la vida, por ejemplo: los amaneceres y los ocasos, las gaviotas, los cóndores, las águilas, las palomas y las golondrinas, las montañas, los valles, los ríos y los mares, el deporte, el arte, la agricultura, la arquitectura, la selva, los guacamayos, los monos, los tigres, los leones, los cocodrilos, los elefantes, los arroyos, los seres humanos de todos los colores, el ilusorio tiempo que te empuja y la eternidad que te permite cambiar de rumbo y recomenzar a cada instante.

No estás deprimido, estás distraído de las maravillas que suceden alrededor tuyo desde nacimientos a cosechas, desde revoluciones a conciertos, desde campeonatos de fútbol a viajes interplanetarios.

No estás deprimido por algo que pasó, sino distraído del todo… Que es ahora mismo.”

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

TODO EN ESTA VIDA TIENE LADO POSITIVO

No temas a lo desconocido

No perdiste a nadie; el que murió simplemente se nos adelantó porque para allá vamos todos.
Además, lo mejor de él, el AMOR, sigue en tu corazón. ¿Quién podría decir que Jesús está muerto? No hay muerte, hay mudanza y del otro lado, te espera gente maravillosa.

Lo que llamamos muerte es el estado más sutil de la luz.

Si quieres vida, vive en paz. Si quieres muerte vive en guerra. Cuida cada palabra porque estamos estructurados en palabras. No hieras ni ofendas a nadie porque de uno en otro puede volver a ti transformada en una bomba.

Además la vida no te quita cosas, te libera de cosas.

Te aliviara para que vueles más alto, para que alcances la plenitud.
De la cuna a la tumba es una escuela; lo que llamas problemas son lecciones y la vida es dinámica, está en constante movimiento.
Solo debes estar atento al presente, mi madre decía: “Yo me encargo del presente, el futuro es asunto de Dios”. Jesús decía: “el mañana no interesa, él traerá nueva experiencia, a cada día le basta con su propio afán”

Ahora que estás solo y tranquilo, olvida lo que eres… Eso es creación de los demás… Escucha tu corazón… ¿Qué quieres ser? ¿Qué quieres hacer ahora? Porque la vida es ahora mismo.

Olvida lo que crees que eres y comienza de cero ahora mismo.

Entonces convivirás con todos fácilmente. Es tan grato vivir sin divisiones: bueno-malo, rico-pobre, negro-blanco, amigo-enemigo, compatriota-extranjero. Es tanta la liviandad cuando no hay enemigos que podemos volar en cualquier momento porque la alegría tiene la simpatía de la magia.

No perdiste la inocencia solo ocultas por miedo a la burla de los que… Solo pueden catalogar porque la perdieron. Déjala salir y recomenzarán los juegos de tus primeros años ahora enriquecidos por la inteligencia. Libérate de los pre conceptos de la memoria, mira todo como primera vez: te salvarás del aburrimiento que ensombrece a los que creen saberlo todo.

No confundas a la actividad con la vida.

Ahí está el sol, exactamente ahí, para que lo veas. Ahí está el árbol hace muchos años para que te des cuenta que es una maravilla. Libérate de la imagen que te ayudaron a forjar los demás y volverás a la inocencia, nuestro estado natural. Así estarás contento con las arrugas que confirman todo lo que viviste, es más, solo en la inocencia sentirás que eres parte de lo que te rodea. Solo en la inocencia puedes ver a Dios.

No te agotes compitiendo.

Dios sabe lo que es para ti y el dato está en tu corazón. Entonces, haz lo que amas, no hay otra manera de vivir. El mismo AMOR que me trajo, te trajo. Es un error decir que hacemos el amor. El AMOR nos hizo y nos modela día a día y ésto depende de lo blando, de los abiertos que estemos. Por ser obra del AMOR, el ser humano es maravilloso. A él le debemos el pan, el queso, el vino, la música, la pintura, los aviones y la computadora entre otras tantas cosas.

No busques afuera lo que no tienes adentro.

No puedes pedir AMOR si no lo diste. No puedes pedir justicia si no fuiste justo. No puedes buscar paz afuera si no la tienes dentro. Pero no hay apuro, tienes a la eternidad delante, además, el trayecto suele ser más emocionante que la llegada si es que se puede llegar a alguna parte.

Arriesga… La vida es cambio permanente. Siempre te da revancha. Recuerda que el que no está dispuesto a perderlo todo, no está preparado para ganar nada. Ahora que estás solo y tranquilo, que estás contigo mismo, único ser del que eres responsable, te diré…

Deja que la curiosidad te lleve donde sucede la vida.

No seas espectador de la televisión, sino protagonista de la tierra. Recuerda que a los que se animaron les debemos todo. Píntate un sí en la frente para que se te acerquen los que quieren vivir, sin preocuparte por el tiempo… En una eternidad se recomienza a cada instante y no pierdas energías cuidándote porque la vida es bello peligro.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

QUE NO SE TE PASE LA VIDA

No estás deprimido, estás distraído

Ella creía que en la pobreza se está más cerca del AMOR porque el dinero nos distrae con demasiadas cosas y nos aleja porque nos hace desconfiados.
No encuentras la felicidad y… ¡es tan fácil!
Solo debes escuchar a tu corazón antes de que intervenga tu cabeza que está condicionada por la memoria, que complica todo con cosas viejas, con órdenes del pasado, con prejuicios que enferman y encadenan.
La cabeza divide, es decir, empobrece. La cabeza no acepta que la vida es como es, no como debería ser.
El que hace lo que ama está bendito y condenado al éxito, que deberá llegar cuando deba. Lo que debe ser será y llegará naturalmente.
No hagas nada por obligación, ni por compromiso, sino por AMOR. Entonces habrá plenitud y en esa plenitud, todo es posible, sin esfuerzos, porque te mueve la fuerza natural de la vida.
Dios te puso un ser humano a cargo y ese eres tú.

A ti debes hacerte libre y feliz.Después podrás compartir la vida verdadera con los demás.

Ponte frente al espejo y piensa que esa criatura que estás viendo es obra de Dios y decide ahora mismo ser feliz.
La felicidad es una adquisición, no algo que te llegará de afuera. Además, la felicidad no es un derecho sino un deber porque si no eres feliz estás amargando a todo el barrio.
Un solo hombre que no tuvo ni talento ni valor para vivir, mandó a matar seis millones de hermanos judíos. Hay tantas cosas para gozar y nuestro paso en la tierra es tan corto, que sufrir es una pérdida de tiempo.
Si tienes cáncer o SIDA pueden pasar dos cosas; las dos son buenas. Si te gana, ¡te liberas del cuerpo que es tan molesto!: “Tengo hambre, tengo frío, tengo sueño, tengo ganas, tengo razón, tengo dudas”.
Si le ganas a esto serás más humilde, más agradecido, por lo tanto, fácilmente feliz, libre del tremendo peso de la culpa, la responsabilidad y la vanidad, dispuesto a vivir cada instante profundamente, como debe ser.
Ayuda al niño que te necesita, ese niño será socio de tu hijo, ayuda a los viejos y los jóvenes te ayudarán cuando lo seas. Además el servicio es una felicidad segura, así como gozar de la naturaleza y cuidarla para el que vendrá. Da sin medida y te darán sin medida.
Ama hasta convertirte en lo amado, y más aún, hasta convertirte en el mismísimo AMOR.
Que no te confundan unos pocos homicidas y suicidas. El bien es mayoría pero no se nota porque es silencioso. Una bomba hace más ruido que una caricia pero por cada bomba que destruye, hay millones de caricias que alimentan a la vida.
( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

LA MUERTE ES VIVIR DE OTRA MANERA

Nunca digas adiós…

“La muerte es el paso a un nuevo estado de conciencia en el que se continúa experimentando, viendo, oyendo, comprendiendo, riendo, y en el que se tiene la posibilidad de continuar creciendo. La única cosa que perdemos en esta transformación es nuestro cuerpo físico, pues ya no lo necesitamos. Es como si se acercase la primavera, guardamos nuestro abrigo de invierno, sabiendo que ya está demasiado usado y no nos lo pondremos de todas maneras. La muerte no es otra cosa. Ninguno de mis enfermos que haya vivido una experiencia del umbral de la muerte, ha tenido a continuación miedo a morir, y quisiera subrayarlo, ¡ni siquiera uno solo de ellos!”

La pérdida de un ser querido es la peor fractura interior que una persona puede sufrir.

Todos sabemos que la muerte es inevitable, que no solo llegará a nuestros seres amados, sino también a nosotros mismos. Sin embargo, tendemos a no pensar en ella y evitamos mirarla de frente. Pero el fatídico día llega, de manera inesperada o no, y nos golpea el alma rotundamente.

El duelo es el proceso psicológico de adaptación que sigue a la pérdida de un ser querido. Se trata de una reacción, principalmente emocional, en forma de sufrimiento y aflicción. Solo cuando se supera el dolor, se puede convivir con el recuerdo de la persona fallecida sin experimentar tristeza crónica.

En realidad, la muerte es un proceso y empezamos a morir en el instante en que nacemos. Morimos un poco cada día. El papa Pablo VI dijo: “Alguien debería decirnos, cuando empieza nuestra existencia, que ya estamos muriendo. Entonces sabríamos apreciar la vida en cada minuto de cada día”. 

Nuestra mortalidad es un maestro de vida. Si no fingimos que no existe, nos enseñará tres lecciones que nos ayudarán a vivir plenamente. En mi familia se hablaba abiertamente de la muerte y el Día de Todos los Santos y el de los Difuntos, en los que los muertos son recordados y conmemorados, se encontraban entre las celebraciones más importantes del año. Fue así como, ya en mi infancia, aprendí la primera lección: la muerte, por indeseable que sea, es inevitable, así que ¿por qué pasarse la vida luchando contra ella?

Primera lección: La muerte hay que aceptarla porque es inevitable.

Cuando algo cae completamente fuera de nuestro alcance, es imposible encontrar la felicidad hasta que aprendamos a aceptarlo como parte integral del curso normal de la vida.

Segunda lección: la vida es ahora.

El inicio y el final de la vida son como las cubiertas de un libro. Lo que importa es la historia de las páginas -la vida- que hay en medio.

¿Cómo vivirías si supieras que hoy es tu último día? ¿Por qué tiene que ser el último momento para que elijas disfrutar del momento? Vive antes de morir.

– Tercera lección: en la vida estamos de paso.

La vida es un juego de suma cero: llegamos a ella sin nada y partimos sin nada. Para que esto sea matemáticamente correcto, todo lo que nos dan nos ha de ser arrebatado algún día.

Cuando llegue la hora dejaremos todo atrás: la riqueza material, las personas a las que amamos y todo lo que nos resulta tan querido. Lo que llamo “mío” lo disfruto y lo aprecio plenamente, pero no conservaré nada. ¿Por qué nos aferramos con tanta fuerza cuando tarde o temprano todos habremos desaparecido?

Aceptar la muerte nos ancla a la verdad y nos liberará. Puedes leer esto con tristeza o dejar que la verdad te libere.

Si pudiéramos conocer de antemano que estaremos bien después de la muerte, no nos importaría tanto morir. La muerte es difícil de aceptar si crees que ella te arrebata la vida.

Creo que hay vida después de la muerte. Creo que la vida no es el cuerpo sometido a las limitaciones del espacio-tiempo. Mi forma física descendió de las de mis padres, pero no mi vida. Mi vida ha existido siempre, fuera de los límites del espacio-tiempo. La muerte es el final de nuestra forma física, pero no es lo contrario de la vida.

El nacimiento y la muerte son los portales a través de los que llegamos y abandonamos esta forma física, pero la vida reside fuera de lo físico, donde no hay antes ni después. En realidad nunca morimos. En eso se basa la paz que he experimentado tras la desaparición de mis seres queridos. Confío en que nos volveremos a encontrar.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

NADA ES LO QUE PARECE

La señal

Un señor muy creyente sentía que estaba cerca de recibir una luz que le iluminara el camino que debía seguir.
Todas las noches, al acostarse, le pedía a Dios que le enviara una señal sobre cómo tenía que vivir el resto de su vida.
Así anduvo por la vida, durante dos o tres semanas en un estado pensativo buscando recibir una señal divina.
Hasta que un día, paseando por un bosque, vio a un cervatillo caído, tumbado, herido, que tenía una pierna medio rota.
Se quedó mirándolo y de repente vio aparecer a un puma. La situación lo dejó congelado; estaba a punto de ver cómo el puma,
aprovechándose de las circunstancias, se comía al cervatillo de un solo bocado. Entonces se quedó mirando en silencio, temeroso también de que el puma, no satisfecho con el cervatillo,
lo atacara a él. De repente, vio al puma acercarse al cervatillo. Entonces ocurrió algo inesperado: en lugar de comérselo, el puma comenzó a lamer las heridas.

Después se fue y volvió con unas pocas ramas humedecidas y se las acercó al cervatillo con la pata para que este pudiera beber el agua; y después se fue y trajo un poco de hierba húmeda y se la acercó para que el cervatillo pudiera comer.
Increíble.
Al día siguiente, cuando el hombre volvió al lugar, vio que el cervatillo aún estaba allí, y que el puma otra vez llegaba para alimentarlo, lamer las heridas y darle de beber.
El hombre se dijo:
Esta es la señal que yo estaba buscando, es muy clara. “Dios se ocupa de proveerte de lo que necesites, lo único que no hay que hacer es ser ansioso y desesperado corriendo detrás de las cosas”.
Así que agarró su ataerito, se puso en la puerta de su casa y se quedó ahí esperando que alguien le trajera de comer y de beber.
Pasaron dos horas, tres, seis, un día, dos días, tres días… Pero nadie le daba nada.
Los que pasaban lo miraban y él ponía cara de pobre cito imitando al cervatillo herido, pero no le daban nada. Hasta que un día pasó un señor muy sabio que había en el pueblo y el pobre hombre, que estaba muy angustiado, le dijo:

– Dios me engañó, me mandó una señal equivocada para hacerme creer que las cosas eran de una manera y eran de otra.
¿Por qué me hizo esto? Yo soy un hombre creyente…
Y le contó lo que había visto en el bosque.
El sabio lo escuchó y luego dijo:
– Quiero que sepas algo. Yo también soy un hombre muy creyente.
Dios no manda señales en vano. Dios te mandó esa señal para que aprendieras.
El hombre le preguntó:
– ¿Por qué me abandonó?
Entonces el sabio le respondió:
– ¿Qué haces tú, que eres un puma fuerte y listo para luchar, comparándote con el cervatillo?
Tu lugar es buscar algún cervatillo a quien ayudar, encontrar a alguien que no pueda valerse por sus propios medios.

Galletitas

A una estación de trenes llega una tarde, una señora muy elegante. En la ventanilla le informan que el tren está
retrasado y que tardará aproximadamente una hora en llegar a la estación.
Un poco fastidiada, la señora va al puesto de diarios y compra una revista, luego pasa al kiosco y compra un
paquete de galletas y una lata de gaseosa.
Preparada para la forzosa espera, se sienta en uno de los largos bancos del andén. Mientras hojea la revista, un
joven se sienta a su lado y comienza a leer un diario. De repente la señora ve, por el rabillo del ojo, cómo el
muchacho, sin decir una palabra, estira la mano, agarra el paquete de galletas, lo abre y después de sacar una comienza
a comérsela con muchas ganas.
La mujer está indignada. No está dispuesta a ser grosera, pero tampoco a hacer de cuenta que nada ha pasado;
así que, con gesto ampuloso, toma el paquete y saca una galletas que exhibe frente al joven y se la come mirándolo
fijamente.
Por toda respuesta, el joven sonríe… Y toma otra galleta.
La señora gime un poco, toma una nueva galleta y, con ostensibles señales de fastidio, se la come sosteniendo
otra vez la mirada en el muchacho.
El diálogo de miradas y sonrisas continúa entre galleta y galleta. La señora cada vez más irritada, el muchacho
cada vez más divertido.
Finalmente, la señora se da cuenta de que en el paquete queda solo la última galleta. ” No podrá ser tan
caradura”, piensa, y se queda como congelada mirando alternativamente al joven y a las galletas.
Con calma, el muchacho alarga la mano, toma la última galleta y, con mucha suavidad, la corta exactamente por
la mitad. Con su sonrisa más amorosa le ofrece media a la señora.
¡Gracias! – dice la mujer tomando con rudeza la media galleta.
– De nada – contesta el joven sonriendo angelical mientras come su mitad.
El tren llega.
Furiosa, la señora se levanta con sus cosas y sube al tren. Al arrancar, desde el vagón ve al muchacho todavía sentado en el banco del andén y piensa: ” Insolente”.
Siente la boca reseca de ira. Abre la cartera para sacar la lata de gaseosa y se sorprende al encontrar, cerrado, su
paquete de galleta…!Intacto!.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

LA FAMILIA NO SE ELIGE

Familias tóxicas

Es posible que seas la persona más afortunada del mundo y tengas una familia maravillosa. Sin embargo, por cada familia feliz hay cientos que son infelices.

Muchas veces, hay familias maravillosas porque tienen que ser maravillosas sí o sí. El deseo de que así sea, es más un deseo que una realidad. Hay mucho auto engaño.

Nacemos donde nacemos. No elegimos a nuestros padres ni nuestro contexto familiar. Nuestros padres y hermanos pueden ser encantadores o ser asesinos en serie. No depende de nosotros lo más mínimo.

Lo ideal, sin ningún tipo de dudas, es que te lleves bien con tu familia, pero a menudo no solo no es posible, sino que el precio que tienes que pagar por conseguirlo es demasiado elevado.

Las relaciones familiares provocan mucho sufrimiento, así como nefastas consecuencias negativas que perduran años y años. No se puede tolerar cualquier cosa por el mero hecho de que quien lo haga sea tu padre, tu madre o tu hermano. No se puede tolerar todo. No se puede tolerar el maltrato físico o psicológico, ni el sufrimiento gratuito.

Yo estoy a favor de la vida familiar, pero solo si es buena para todos los integrantes. Tener un lazo de sangre no implica que haya que sentir un lazo afectivo.

Si no encajas en la familia que tienes, no te sientas mal por ello. Quizás tenéis prioridades, valores o puntos de vista diferentes. Si no puedes convivir con alguien que maltrata a otras personas, que roba, que es machista, homófobo, mentiroso o manipulador, no tienes nada de qué avergonzarte. No te sientas culpable. Ten cuidado con la culpabilidad originada por la propia familia o sus emisarios.

Es posible que no quieras a tu familia. No pasa nada, no se puede querer a quien te hace daño continuamente. No eres un bicho raro. La mayoría de las personas sufren directa o indirectamente por culpa de sus familias. El origen de muchos problemas de salud mental está en la familia.

Posiblemente no te entiendan. No tienes nada que justificar. No tienes por qué dar explicaciones.

Suelta lastre, deja de cargar con lo que te limita. Tu familia no tiene por qué atraparte ni condicionarte. Empieza a escribir tu propio destino.

Esto no significa que haya que renunciar a formar tu propia familia. Precisamente has tenido una gran lección de vida y tú puedes ser el origen de una familia donde reine el respeto y el amor.

 

 “La rana que no sabía que estaba hervida”

Imaginad una cazuela llena de agua, en cuyo interior nada tranquilamente una rana. La cazuela se está calentando a fuego lento. Al cabo de un rato el agua está tibia. A la rana, esto le parece agradable, y sigue nadando.

La temperatura empieza a subir. Ahora el agua está caliente. Un poco más de lo que suele gustarle a la rana. Pero ella no se inquieta y además el calor siempre le produce algo de fatiga y somnolencia.

Ahora el agua está caliente de verdad. A la rana empieza a parecerle desagradable. Lo malo es que se encuentra sin fuerzas, así que se limita a aguantar y no hace nada más.

Así, la temperatura del agua sigue subiendo poco a poco, nunca de una manera acelerada, hasta el momento en que la rana acaba hervida y muere sin haber realizado el menor esfuerzo por salir de la cazuela.

Si la hubiéramos sumergido de golpe en la cazuela con el agua a cincuenta grados, de una sola zancada ella se habría puesto a salvo, saltando fuera del recipiente.

Como la rana que se va durmiendo en el agua caliente hasta quedar escaldada, cuando nos demos cuenta, puede ser demasiado tarde, o el tren que queríamos tomar ya habrá pasado de largo.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

PARA QUÉ PERDER TIEMPO EN TONTERÍAS

Aprovechar el tiempo

A veces creo que estoy obsesionado con aprovechar el tiempo. Pasé muchos años de mi vida dedicada a trabajar para ganar dinero; muchos años de mi infancia dedicada a ver la televisión. Muchos años, meses, días, horas, minutos y segundos perdidos. Me perdí mucho. Mucho más de lo que os llegáis a imaginar.

Pero ya todo eso se acabó. 

Ahora a cada minuto de mi vida me pregunto: ¿merece la pena dedicarle tiempo a ésto? ¿Para qué lo hago? Y en la medida de lo posible elijo la opción que considero más importante para mí. Me siento responsable de elegir:

¿Limpiar mi casa o tomar un té con un amigo?

¿Ver la televisión o hablar con mi familia en la comida?

¿Trabajar muchas horas para tener más dinero o tener menos y pasar tiempo con mis hijos?

¿Dejar pasar las horas o gestionar mi tiempo para que sea productivo?

¿Mirar el whatsap o escuchar lo que me dice una amiga?

¿Tirarme en el sofá o dar un paseo por la naturaleza?

¿Avanzar en mis proyectos o echar una tarde de rol con los amigos?

¿Ver las noticias o leer un libro que me guste?

¿Terminar el máximo de tareas o pararme a preguntar a una compañera cómo le va?

¿Comer sola o invitar a toda mi familia a comer?

¿Pasar una hora en facebook o ver un documental de mis temas favoritos?

¿Ver una película o jugar al Catán con mis hermanos?

¿Ahorrar dinero o hacer un viaje apasionante?

¿Vivir una vida estándar o vivir una gran vida?

Creo fervientemente que construimos la vida que queremos, elegimos cada momento qué vida queremos tener.

Es cierto que aún a veces hago cosas que no me hacen sentir plenamente. Por suerte soy consciente de ellas y estoy trabajando para cambiarlas.

Vivir así tiene unos costes a pagar. Vivir intensamente puede ser a veces muy estresante y caótico. Cada día es diferente y está lleno de miles de experiencias. Hay días que mi vida es una auténtica locura. Bendita locura.

Porque el tiempo se va como arena entre las manos.

Porque cada uno de esos minutos no va a volver.

Porque no sabemos el tiempo que nos queda.

Porque no hay una segunda oportunidad para vivir.

Ésta es mi vida y la quiero vivir ahora.

 La vida se escapa sin realmente vivirla 

 Es como si todo lo que hago estuviera programado y no quedase espacio para la improvisación. Te despiertas con una alarma y necesariamente tienes que vestirte y salir de casa. Ir al trabajo o a clase, ver siempre a las mismas personas, hacer siempre las mismas cosas.

Te preparas durante un tercio de tu vida para trabajar y el resto te la pasas trabajando. Solo al final, cuando ya eres demasiado viejo para hacer todo lo que un día soñaste, tienes el tiempo necesario para poder hacerlo. Entonces, miras atrás y te das cuenta de que te perdiste la vida por hacer siempre aquello que se suponía tenías que hacer.

Se supone que somos libres para hacer lo que queramos, pero vivimos dependiendo del dinero que tengamos en el banco. Lo peor de todo es que lo tenemos tan asumido que ni siquiera nos paramos a pensarlo. Vivimos en rutina. Días iguales se suceden en el calendario y nunca llega el momento en que al fin podamos disfrutar de la vida.

Y pasa volando.

Es como el tren que no se detiene en la estación cuando lo estás esperando. La vida es solo una y no te enteras de que te la estás perdiendo. Si no coges el tren, constrúyelo. Crea una maldita estación y vive en ella si te da la gana.

No digo que no estudies o trabajes, sino que no pierdas las ganas de vivir. Hay vida más allá de las cuatro paredes que rodean tu rutina. Atrápala y déjate llevar ahora que estás a tiempo.

No esperes a hacerte viejo para empezar a vivir.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

TODO LO QUE NOS PASA TIENE UN MOTIVO

Si no hubiese..

Si no hubiese sido por mi necesidad, no sabría lo que es pedirte…

Si no hubieses permitido la enfermedad, no conocería la sanidad…

Si no hubiese sido por la preocupación, no sabría lo que es confiar en Ti…

Si no hubieses permitido la pobreza, no sabría lo que es tu provisión…

Si no hubiese sido por la ofensa, no sabría lo que es perdonar…

Si no hubieses permitido el dolor, no conocería tu consuelo…

Si no hubiese sido por la angustia, no sabría lo que es tu paz.

Si no hubieses permitido el aguijón, no conocería la suficiencia de tu gracia…

Si no hubiese sido por el desacuerdo, no sabría lo que es someterme…

Si no hubieses permitido el obstáculo, no conocería tu solución…

Si no hubiese sido por el aprieto de mucha gente, no sabría lo que es apartarme contigo a descansar un poco…

Sin no hubiese sido por la montaña, no habría aprendido a vivir en las alturas…

Si no hubiese sido por llorar sobre tu hombro, no sabría lo que es tu mano enjugando las lágrimas…

Si no hubieses permitido las dificultades, no conocería la fe en tus promesas…

Si no hubiese sido por la imposibilidad, no sabría lo que es descansar en Ti…

Sin mi debilidad, no habría aprendido a vivir en tu poder…

Si no hubieses permitido la muerte, no sabría lo que es la vida eterna…

Sin la oscuridad, no habría aprendido a vivir por fe…

Sin la soledad no hay intimidad contigo…

Sin mi ignorancia, no habría aprendido a buscar tu sabiduría.

Si no hubiese sido por el desierto, no sabría lo que son tus manantiales…

Sin tus demoras, no habría aprendido a esperar en Ti.

Sin las pruebas, no habría aprendido a soportar con paciencia…

Sin perdición, no hay salvación…

Sí comparas tu vida con otros…

¿No crees que sería bueno hacer un inventario de los bienes que has recibido, para así vivir con mayor alegría y optimismo?

¿Por qué llorar mientras voy andando, si otros ríen y no tienen pies?
¿Por qué vivir pensando en el 10 % de las cosas que nos hacen sufrir, y no recordar el 90 % que nos hacen felices?

En tu cuerpo hay 800 mil millones de células trabajando continuamente en perfecta armonía y coordinación en tu favor…

En tu cerebro tienes 13 mil millones de neuronas trabajando tan sabiamente, que si las quisieras reemplazar por la computadora más perfecta del mundo, ocuparía el sitio de un edificio de setenta pisos de alto…

Tienes un corazón, que es una maravilla de la naturaleza. Bombea hora tras hora, 36 millones de latidos, año tras año, despierto o dormido, impulsando la sangre a través de 100 mil kilómetros de venas y arterias, que llevan… mas de 2 millones de litros de sangre al año…

Te puedes mover, pasear, correr, bailar o hacer deporte. Para ello, tienes 500 músculos, 200 huesos y 7.000 nervios, sincronizados para obedecer y llevarte a donde quieras…

En tus oídos hay 24 mil millones de filamentos que vibran con el viento, el reír de los niños, la suave música, con el trepidar de las aguas espumantes y al escuchar las palabras amables de las personas que aprecias…

En tus ojos, Dios ha depositado 100 millones de receptores que te permiten gozar de la magia de los colores, la luz, la simpatía de las personas y la majestad de la naturaleza…

Tus pulmones son los mejores filtros del mundo. A través de 600 millones de alvéolos, purifican el aire que reciben y liberan a tu cuerpo de desperdicios dañinos.

Eres un ser humano único, capaz de crear, descubrir, inventar, pensar, soñar, imaginar, comunicarte, hablar, tranquilizar, animar, estimular, inspirar, perdonar… Capaz de sentir, disfrutar, recibir amor y decir… Te amo.

Tu sangre es un formidable tesoro. Son apenas 4 litros pero allí hay 22 millones de células sanguíneas. En cada célula hay muchas moléculas y en cada molécula hay un átomo que oscila más de 10 millones de veces por segundo…

Cada día mueren 2 millones de tus células y son reemplazadas por 2 millones más, en una resurrección que ha continuado desde el día que naciste…

En tu cerebro hay 4 millones de estructuras sensibles al dolor, 500 mil detectores táctiles, y 200 mil detectores de temperatura…

¿Crees que vale la pena tu vida?
Dedicamos mucho tiempo pensando en lo que nos hace falta y casi nunca nos detenemos a recordar y agradecer a Dios lo que nos regala día a día…

No te entristezcas por lo que no pudiste ser, agradece por los dones que Dios puso en tu vida, tu familia, tus amistades y las oportunidades de ser alguien importante…

Cuenta tus bienes y tus alegrías. No pierdas tiempo en “pensamientos pesimistas” y “recuerdos tristes”

¿Y sabes por qué?…¡¡¡ Porque vales mucho!!! Para Dios no tienes precio.

¿Tienes derecho a quejarte?

Si tienes una comida en el refrigerador, ropa para cubrirte, un techo que te proteja y una cama donde dormir, eres más rico que el 75% de la humanidad.

Si tienes dinero en el banco y en la billetera y aún te sobran unas monedas, estás entre el 8% más rico en el mundo.

Si te despertaste esta mañana con más salud que enfermedad, eres más afortunado que el millón de personas que sobrevivirá esta semana.

Si nunca has experimentado el peligro de la guerra, la soledad de la prisión, la agonía de la tortura o los dolores del hambre, estás mejor que 500 millones de seres humanos.

Si en los últimos días pudiste ir a la iglesia sin miedo de ser hostigado, arrestado, torturado o asesinado, eres más afortunado que 3 mil millones de habitantes de la tierra.

Si tus padres viven y aún están casados, eres un ser raro en el mundo.

Si puedes levantar la cabeza y sonreír, eres bendito porque la mayoría, aunque podría, no lo hace.

Si puedes leer este mensaje eres doblemente feliz, pues sabes que alguien pensó en ti y, además, no eres uno de los 2 mil millones de personas que no saben leer.

Cuenta tus bendiciones y no olvides lo afortunado que eres.

DALE GRACIAS A DIOS

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

EN LOS DETALLES SE HAYA LA DIFERENCIA

Los pequeños detalles

El alumno, según él, había terminado el cuadro. Llamó a su maestro para que lo evaluara. Se acercó el maestro y observó la obra con detenimiento y concentración durante un rato. Entonces, le pidió al alumno la paleta y los pinceles. Con gran destreza dio unos cuantos trazos aquí y allá.

Cuando el maestro le regresó las pinturas al alumno el cuadro había cambiado notablemente. El alumno quedó asombrado; ante sus propios ojos la obra había pasado de mediocre a sublime.

Casi con reverencia le dijo al maestro:

¿Cómo es posible que con unos cuantos toques, simples detalles, haya cambiado tanto el cuadro?

Es que en esos pequeños detalles está el arte. Contestó el maestro.

Si lo vemos despacio, nos daremos cuenta que todo en la vida son detalles. Los grandes acontecimientos nos deslumbran tanto que a veces nos impiden ver esos pequeños milagros que nos rodean cada día. Un ave que canta, una flor que se abre, el beso de un hijo en nuestra mejilla, son ejemplos de pequeños detalles que al sumarse pueden hacer diferente nuestra existencia.

Todas las relaciones familia, matrimonio, noviazgo o amistad, se basan en detalles. Nadie espera que remontes el Océano Atlántico por él, aunque probablemente sí que le hables el día de su cumpleaños. Nadie te pedirá que escales el Monte Everest para probar tu amistad, pero sí que lo visites durante unos minutos cuando sabes que está enfermo.

Hay quienes se pasan el tiempo esperando una oportunidad para demostrar de forma heroica su amor por alguien. Lo triste es que mientras esperan esa gran ocasión dejan pasar muchas otras, modestas pero significativas. Se puede pasar la vida sin que la otra persona necesitara jamás que le donaras un riñón, aunque se quedó esperando que le devolvieras la llamada.

Se piensa a veces que la felicidad es como sacarse la lotería, un suceso majestuoso que de la noche a la mañana cambiará una vida miserable por una llena de dicha. Esto es falso, en verdad la felicidad se finca en pequeñeces, en detalles que sazonan día a día nuestra existencia.

Nos dejamos engañar con demasiada facilidad por la aparente simpleza. NO desestimes jamás el poder de las cosas pequeñas: una flor, una carta, una palmada en el hombro, una palabra de aliento o unas cuantas líneas en una tarjeta. Todas estas pueden parecer poca cosa, pero no pienses que son insignificantes.

En los momentos de mayor dicha o de mayor dolor se convierten en el cemento que une los ladrillos de esa construcción que llamamos relación. La flor se marchitará, las palabras quizá se las llevará el viento, pero el recuerdo de ambas permanecerá durante mucho tiempo en la mente y el corazón de quien las recibió.

¿Qué esperas entonces? Escribe esa carta, haz esa visita, levanta el teléfono. Hazlo ahora, mientras la oportunidad aún es tuya. NO lo dejes para después por parecerte poca cosa. En las relaciones no hay cosas pequeñas, únicamente existen las que se hicieron y las que se quedaron en buenas intenciones…

Moraleja:

“Si una persona habla o actúa con el pensamiento puro, la felicidad le sigue como una sombra que nunca le deja”.

El valor de las pequeñas cosas

Aprende a escuchar el valor de las pequeñas cosas, de los acontecimientos. Verás que todo habla, todo se comunica contigo.

Con cada falta de delicadeza, hiero un poco a aquellos que me aman.

Con cada desatención, no soy ni educado ni cristiano.

Con cada mirada de desprecio, alguien resulta golpeado.

Con cada gesto de impaciencia, doy una bofetada invisible a los que viven a mi lado.

Con cada perdón que niego, va un pedazo de mi egoísmo.

Con cada resentimiento que esbozo, revelo algo de mi amor propio herido.

Con cada palabra áspera que digo, pierdo algunos puntos para el cielo.

Con cada omisión que practico, rasgo una hoja del evangelio.

Con cada limosna que niego, alejo más triste a un pobre.

Con cada juicio malicioso, aflora mi lado mezquino.

Con cada oración que no hago, pierdo un mundo de gracia.

Con cada burla que hago, peco contra el silencio.

Con cada llanto que enjuago, hago más feliz a mi hermano.

Con cada acto de fe, canto un himno a la vida.

Con cada sonrisa que desparramo, planto una esperanza.

Con cada espina que clavo, lastimo el corazón de un semejante.

Con cada espina que arranco, alguien besará mi mano.

Con cada rosa que ofrezco los Ángeles dicen AMEN

(Estas historias fueron escritas por autor desconocido. La historias fue coleccionada y recontada por Adonis).

EL TIEMPO Y SU VALOR

El valor de un minuto

Un minuto sirve para sonreír.
Sonreír para el otro, para ti y para la vida.
Un minuto sirve para ver el camino, admirar una flor, sentir el perfume de la flor, sentir el césped mojado, percibir la transparencia del agua.
Se requiere apenas de un minuto para evaluar la inmensidad del infinito, aunque sin poder entenderlo.
Un minuto apenas para escuchar el canto de los pájaros. 
Un minuto sirve para oír el silencio, o comenzar una canción.
Es en un minuto en que uno dice el “sí” o el “no” que cambiará toda su vida.
Un minuto para un apretón de mano y conquistar un nuevo amigo.
Un minuto para sentir la responsabilidad pesar en los hombros, la tristeza de la derrota, la amargura de la incertidumbre, el hielo de la soledad, la ansiedad de la espera, la marca de la decepción, la alegría de la victoria.
En un minuto se puede amar, buscar, compartir, perdonar, esperar, creer, vencer y ser.
En un simple minuto se puede salvar una vida.
Tan solo un minuto para incentivar a alguien o desanimarlo.
Un minuto para comenzar la reconstrucción de un hogar o de una vida.
Basta un minuto de atención para hacer feliz a un hijo, un padre, un amigo, un alumno, un profesor, un semejante.
Solo un minuto para entender que la eternidad está hecha de minutos.
De todos los minutos bien vividos.
Un minuto… Cuántas veces los dejamos pasar sin darnos cuenta… Pero también cuántas veces traemos a nuestras vidas los recuerdos de los minutos vividos llenos de felicidad, de alegría y también de tristezas.
Decimos “un minuto” y nos parece nada.
Pero cómo se aprecia ese minuto al levantar la mano y saludar a un amigo que se va para siempre, cómo se valora ese minuto que hace que lleguemos tarde a nuestros trabajos, cómo se espera ese minuto que nos lleva a reunirnos con los que amamos, nos llena de emoción ese minuto en que nos entregan a nuestro hijo al nacer, y cómo también deseamos que la vida le otorgue más minutos a quien la muerte separará físicamente de nosotros y no veremos más.
Un minuto… Parece increíble… Parece tan poquito y sin embargo puede dejar una huella tan profunda en nuestra vida.
Lo importante es no vivir la vida porque sí, dejando pasar el tiempo.
Alguien alguna vez dijo: “Vive cada minuto como si fuera el último”.
Si todos recordáramos esa frase a diario aprenderíamos a vivir la vida intensamente.
Aprenderíamos a no posponer las emociones más lindas de la vida pensando que “si no es hoy será mañana”.
Tu tiempo es ahora… El futuro es incierto…
Vive cada minuto intensamente.
La vida es Hoy… Que el reloj de tu vida marque cada minuto al compás de los latidos de tu corazón.

La vejez y el paso del tiempo enseñan todas las cosas.

Solo el paso de los años te dará los conocimientos necesarios para comprender el mundo.

Los niños no tienen pasado ni futuro, por eso gozan del presente, cosa que rara vez nos ocurre a nosotros.

Una reflexión acerca del modo en el que los más pequeños experimentan el tiempo.

El tiempo es gratis pero no tiene precio. No puedes poseérlo pero puedes hacer uso de él. No se puede guardar pero se puede gastar. Una vez que lo has perdido ya nunca se puede recuperar.

El tiempo es de las cosas mas baratas que podemos usar pero que sale caro cuando lo desperdiciamos.

El tiempo es la divisa de tu vida. Es la única divisa que tienes, y solo tú puedes determinar cómo será gastada. Sé cuidadoso y no permitas que otras personas la gasten por ti .

Cada uno de nosotros somos dueños de nuestro tiempo.

Sí amas la vida, no pierdas el tiempo, porque el tiempo es de lo que está hecha la vida.

No hay material más caro del que está hecha la vida.

Pierde tu dinero y solo estarás perdiendo dinero, pierde tu tiempo y estarás perdiendo una parte de tu vida.

No olvidemos que cada minuto es poco tiempo pero ya nunca más volverá.

El miedo a la muerte se deriva del miedo a la vida. Un hombre que vive completamente está preparado para morir en cualquier momento.

Vive a tope, sonríe mucho, ama lo que puedas, si no lo haces al final no has logrado nada.

El tiempo es la moneda de tu vida. Ten cuidado para no dejar que otras personas paguen por ti. 

Que nadie marque tu ritmo, tu caminas y tu marcas tu destino y velocidad.

Hasta que no valores tu tiempo, no podrás hacer nada con él. 

Tenemos que no perder nunca la idea de que la vida se gasta y si no la disfrutas estás muerto en vida.

El tiempo es algo creado. Decir ‘no tengo tiempo’ es como decir ‘no quiero.

Querer es poder y con el tiempo mejor no jugar porque él siempre gana la partida.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

¿POR QUÉ EXISTE EL MAL EN EL MUNDO?

¿Donde estaba Dios?

Mi esposo a veces me pregunta por qué pasan cosas malas en la vida a gente buena, y ésto me ayudó contestarle.

Se levantó rápidamente en cuanto vio al cirujano salir de la sala de operaciones.

Ella dijo: ¿Cómo está mí pequeño hijo? ¿Va a estar bien? ¿Cuándo puedo verlo?

El cirujano respondió, “Lo siento. Hicimos todo lo que pudimos, pero su hijo no logró Sobrevivir”

Sally dijo: “¿Por qué les da cáncer a los niños pequeños?” ¿Que ya no le importa a Dios? ¿En dónde estabas Dios, cuando mi hijo te necesitaba?

El cirujano preguntó:

¿Desea un tiempo a solas con su hijo? “Una de las enfermeras saldrá en unos minutos antes de ser transportado a la Universidad.”

Sally le pidió a la enfermera que la acompañara mientras se despedía de su hijo. Corrió sus dedos suavemente con amor a través de su rizado pelo rojizo.

“¿Le gustaría un rizo de su cabello? Le preguntó la enfermera Sally asentando que sí, recibió un rizo que la enfermera cortó poniéndolo en una bolsita de plástico y dándoselo a Sally.

Ella dijo: Fue idea de Jimmy donar su cuerpo a la Universidad para ser estudiado, él dijo que podría ayudar a alguien más, “yo me rehusaba al principio, pero Jimmy dijo: “Mamá, no lo usaré más cuando me muera, tal vez pueda ayudar a que algún niño pase más días con su mamá, continúo diciendo mi Jimmy tenía un corazón de oro. Siempre pensando en alguien más, siempre deseando ayudar a otros si podía.”

Sally salió de Hospital Mercy para niños después de haberse pasado ahí la mayor parte de seis meses.

Puso la bolsa con las pertenencias de Jimmy en el asiento trasero de su auto.

El regreso a casa fue difícil. Era aún más difícil entrar a una casa vacía. Tomó las pertenencias de Jimmy y la bolsa de plástico con el trozo de pelo y se dirigió al cuarto de su hijo.

Empezó a colocar los modelos de carros y otras cosas personales exactamente en el lugar que él los mantenía y abrazada a su almohada lloró hasta que se quedó dormida.

Era casi la medianoche, cuando Sally despertó. Tendida a un lado de la cama estaba una carta doblada, la carta decía lo siguiente:

“Querida mamá, Yo sé que vas a extrañarme, pero no pienses que me olvidaré de ti o que algún día dejaré de quererte solo porque no estoy para decirte que “Te amo” siempre te amaré mamá, y cada día será más. Algún día volveremos a vernos. Hasta entonces, si quieres adoptar un niño para que no te sientas tan sola por mí este bien. Puede usar mi cuarto y mis cosas para jugar con ellas. Pero si decides que sea una niña, probablemente no le gusten las cosas que nos gustan a los niños. Tendrás que comprarle muñecas y cosas que le gustan a las niñas, tú sabes.

No estés triste mamá pensando en mí. Este es un lugar muy lindo. La abuela y el abuelo me recibieron en cuanto llegué aquí y me mostraron algunos sitios, pero tomará mucho tiempo conocer todo esto. Los ángeles son lindos. Me encanta verlos volar. ¿Y sabes que? Jesucristo no se parece nada a ninguna de sus fotografías. Pero en cuanto lo vi., sabía que era El Jesús mismo me llevó a ver a Dios. Mamá, y ¡adivina que! Me tocó sentarme en su pierna y hablar con Él, como si fuera alguien importante.

Ahí fue cuando le dije que quería escribirte una carta para despedirme y todo eso. Pero yo ya sabía que no estaba permitido, Pero ¿sabes que mamá? Dios me dio papel y hasta me prestó su pluma personal para escribirte esta carta. Creo que se llama Gabriel el ángel que te va a dejar la carta.

Dios me dijo que te diera la respuesta a una de las preguntas que le hiciste, ¿En donde estaba Él cuando yo lo necesitaba?

“Dios dice que estaba conmigo así como cuando estaba con Jesús cuando murió en la cruz. Ahí está El, como siempre lo está con todos sus hijos, oh, por cierto, mamá, nadie más puede leer lo que te escribí en esta carta, solo tú. Para todos los demás esto es solo un papel en blanco, ¿Qué padre no?

Ya tengo que regresarle su pluma a Dios, la necesita para escribir más nombres en el Libro de la Vida.

Esta noche me toca estar en la mesa compartiendo la cena con Jesús, seguro que la comida será de lo mejor. Ya casi se me olvidaba decirte, que ya no me duele nada mamá, ya se me quitó el cáncer completamente, estoy muy contento porque no soportaba más el dolor y a Dios no le gustaba verme sufrir así tampoco, por eso mandó al Ángel de la Misericordia para que fuera por mí. ¡El ángel me dijo que era un pedido especial! ¿Qué te parece éso?”

Firmado con amor, Dios, Jesús y Yo.

¿Por qué te confundes ante los problemas de la vida? 

Déjame el cuidado de todas tus cosas y todo te ira mejor. Cuando te abandones a mí, todo se resolverá con tranquilidad según mis designios. No te desesperes, no me dirijas una oración agitada, como si quisieras exigirme el cumplimiento de tus deseos. Cierra los ojos del alma y dime con calma. Jesús yo en ti Confió… Si Señor en ti Confió…

Evita las preocupaciones y angustias y los pensamientos sobre lo que pueda suceder después. No estropees mis planes, queriéndome imponer tus ideas. Déjame ser Dios y actuar con Libertad. Abandónate confiadamente en mí. Reposa en mí y deja en mis manos tu futuro. Dime frecuentemente: Jesús yo en ti confió. Lo que más daño te hace es tu razonamiento y tus propias ideas y querer resolver las cosas tu manera. Cuando me dices: Jesús, yo en ti confió, no seas como el paciente que le pide al medico que lo cure, pero le sugiere el modo de hacerlo. Déjate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo, yo te amo.

Si crees que las cosas empeoran o se complican a pesar de tu oración sigue confiando. Cierra los ojos del alma y confía.

Continúa diciéndote a toda hora: Jesús confió en ti.

Necesito las manos libres para poder obrar. No me ates con tus preocupaciones inútiles, Satanás quiere eso: agitarte, angustiarte, quitarte paz. Confía solo en mí, abandónate en mí. Así que no te preocupes, hecha en mí todas tus angustias y duerme tranquilamente. Dime siempre: Jesús, confió en ti y veras grandes milagros. Te lo prometo por mi amor…

(Estas historias fueron escritas por autor desconocido)

 

LA FALTA DE SENCILLEZ NOS HACE PEQUEÑOS

LA PAREJA ORGULLOSA

Erase una vez un joven que tenía fama de ser el individuo más terco de la ciudad, y una mujer que tenía fama de ser la doncella más tozuda, e inevitablemente terminaron por enamorarse y casarse.

Después de la boda, celebraron en su nuevo hogar un gran festín que duró todo el día.

Al fin los amigos y parientes no pudieron comer más, y uno por uno se marcharon.

Los novios cayeron agotados, y estaban preparándose para quitarse los zapatos y descansar cuando el marido notó que el último invitado se había olvidado de cerrar la puerta al marcharse.

– Querida, ¿te molestaría levantarte para cerrar la puerta? Entra una corriente de aire.

– ¿Por qué debo cerrarla yo? bostezó la esposa. Estuve de pie todo el día, y acabo de sentarme. Ciérrala tú.

– ¡Conque sí! respondio el esposo. En cuanto tienes la sortija en el dedo, te conviertes en una holgazana.

– ¿Cómo te atreves? gritó la novia. No hace un día que estamos casados y ya me insultas y me tratas con prepotencia. ¡Debí saber que serías uno de esos maridos!

– Vaya, gruñó el esposo. ¿Debo escuchar tus quejas eternamente?

– ¿Y yo debo escuchar eternamente tus protestas y reproches?

Se miraron con mal ceño durante cinco minutos. Luego la novia tuvo una idea.

– Querido, dijo, ninguno de ambos quiere cerrar la puerta, y ambos estamos cansados de oír la voz del otro.
Así que propongo una competencia. El que hable primero debe levantarse a cerrar la puerta.

– Es la mejor idea que he oído en todo el día, respondió el esposo . Comencemos ahora.

Se pusieron cómodos, cada cual en una silla, y se sentaron frente a frente sin decir una palabra.

Así habían pasado dos horas cuando un par de ladrones pasó por la calle con un carro.
Vieron la puerta abierta y entraron en la casa, donde no parecía haber nadie, y se pusieron a robar todo aquello de que podían echar mano.

Tomaron mesas y sillas, descolgaron cuadros de las paredes, incluso enrollaron alfombras.

Pero los recién casados no hablaban ni se movían.

No puedo creerlo, pensó el esposo. Se llevarán todo lo que poseemos, y ella no dice una palabra.

¿Por qué no pide ayuda, se preguntó la esposa?. ¿Piensa quedarse sentado mientras nos roban a su antojo?

Al fin los ladrones repararon en esa callada e inmóvil pareja y, tomando a los recién casados por figuras de cera, los despojaron de sus joyas, relojes y billeteras.

Pero ninguno de ambos dijo una palabra.

Los ladrones se largaron con su botín, y los recién casados permanecieron sentados toda la noche.

Al amanecer un policía pasó por la calle y, viendo la puerta abierta, se asomó para ver si todo estaba bien.
Pero no pudo obtener una respuesta de la pareja silenciosa.

– ¡A ver! rugió. ¡Soy el agente de la ley!
¿Quiénes son ustedes?
¿Esta casa les pertenece?
¿Qué sucedió con todos los muebles?

Y al no obtener respuesta, se dispuso a golpear al hombre en la oreja.

– ¡No se atreva! gritó la esposa, poniéndose en pie. Es mi marido, y si usted le pone un dedo encima, tendrá que responder ante mí.

– ¡Gane! gritó el esposo, batiendo las palmas. ¡Ahora ve a cerrar la puerta!

MORALEJA: El orgullo es un pecado universal, el gran vicio que casi todos tenemos. Es fácil observar el orgullo en los demás pero raramente podemos ver el orgullo que hay en nosotros mismos.

El orgullo es la falta de humildad o de mansedumbre. El orgullo hace que la gente esté en contra de Dios y de los demás. El orgullo nos conduce a la enemistad hacia nuestros semejantes. La persona orgullosa se cree superior a los que le rodean, elevándose por encima de los demás y disminuirlos a ellos. La persona orgullosa hace su propia voluntad en lugar de la de Dios.

Una persona orgullosa es vanidosa, envidiosa, codiciosa, chismosa, criticona, calumniadora, murmuradora, rencorosa, con dureza y altanería en su corazón.

Una persona humilde gana más corazones

-El valor de la humildad nos ayuda a superar el deseo por sobresalir, nuestro corazón es lo que verdaderamente cuenta.

-Es estar libre de disfraces y complicaciones, cualidades que garantizan el trato sincero y sin dobleces.

-La humildad no necesita adornos ni hacer ostentación, porque es como el agua, que sin tener ni gusto, ni sabor, ni color, es igualmente necesaria.

-Para ser auténtico hay que empezar por ser sencillo, no escabroso, dificultoso o peligroso, deseoso de mostrarse tal cual es, sin afectación ni ningún decorado

-La humildad combina la dulzura y la sabiduría.

-Los que personifican la sencillez están libres de pensamientos complicados y extraños. El intelecto es despierto. La sencillez invoca al instinto, la intuición y el discernimiento para crear pensamientos con esencia y sentimientos de empatía.

-Carecer de deseos no significa arreglárselas sin nada. Al contrario, uno lo tiene todo, incluyendo la satisfacción interna. Esto se refleja en el rostro, libre de perturbaciones e ira, esto no significa que todos debamos adoptar este estilo de vida. Sin embargo, se puede aprender de la naturaleza.

–Cuando se observa la ética de la sencillez, casi no hay desperdicio. Todos los recursos se valoran: el tiempo, los pensamientos, las ideas, el conocimiento, el dinero y las materias primas.

-Con la humildad surge la generosidad, que es compartir con un espíritu altruista los ingresos ganados a pulso.

(Este texto esta escrito  por anónimo, fue agregado por Adonis).

 

 

A MAL DÍA, PINTALABIOS ROJO

Ser mujer es un privilegio

Jamás permitas que algún hombre te esclavice, tú naciste para amar y no para ser esclava.

Jamás permitas que tu corazón sufra en nombre del amor, amar es un acto de felicidad, ¿porqué sufrir?.

Jamás permitas que tus ojos derramen lágrimas por alguien que nunca te hará reír.

Jamás permitas que tu cuerpo sea usado, sabes que tu cuerpo es la morada del espíritu.

Jamás permitas quedarte horas esperando por alguien que nunca vendrá, ¡así te lo tenga prometido!.

Jamás permitas que tu nombre sea pronunciado en vano por un hombre, que ni se sabe si tiene nombre.

Jamás permitas que tu tiempo sea desperdiciado por alguien que nunca tendrá tiempo para ti.

Jamás permitas escuchar gritos en tus oídos, ¡el amor es el único que puede hablar más alto!.

Jamás permitas que pasiones desenfrenadas te saquen de un mundo real para otro que nunca existió.

Jamás permitas que los otros sueños se mezclen a los tuyos haciéndolos girar en una gran pesadilla.

Jamás confíes que alguien pueda volver, ¡cuando nunca estuvo presente!.

Jamás permitas prestar tu útero para engendrar un hijo que nunca tendrá un padre.

Jamás permitas vivir en la dependencia de un hombre haciendo creer que tú naciste inválida.

Jamás permitas que quedes linda y maravillosa, ¡para esperar a un hombre que no tiene ojos para admirarte!.

Jamás permitas que tus pies caminen en dirección de un hombre, ¡que solo vive huyendo de ti!.

Jamás permitas que el dolor, que la tristeza, que la soledad, que el odio, que el resentimiento, que los celos, que el rencor y todo que pueda sacar el brillo de tus ojos; haciendo debilitar la fuerza que existe dentro de ti.

Jamás te permitas perder tu dignidad de ser… ¡Mujer!.

“Hombre… Cuídate mucho de hacer llorar a una mujer, pues, ¡Dios cuenta sus lágrimas!.

La mujer salió de tu costilla, no de tus pies para ser pisoteada, ni de tu cabeza para ser superior; sino del lado para ser igual… Debajo de tu brazo para ser protegida y al lado de tu corazón para ser amada.

Yo quiero ser

Yo quiero ser una mujer consciente del privilegio y milagro de la vida… De sentir que tengo todo el derecho a VIVIR y disfrutar lo que ella me ofrece…

Yo quiero ser alguien, para agradecer y retribuir todas las bendiciones que Dios me ha dado…

Yo quiero ser FELIZ siendo yo misma, sin máscaras, sin sentimientos de culpa, conforme a mi vocación, a mi misión y a mis sueños…

Yo quiero tener el coraje de ser y sentirme libre para elegir mis caminos, vencer mis miedos y temores y asumir las consecuencias de mis actos…

Yo quiero tener alegría para reír, para hacer y recorrer mi camino a la felicidad, para sentir la energía de VIVIR plena e intensamente…

Yo quiero sentir, ser una mujer COMPLETA, amarme, reconocer que soy única, irrepetible e irreemplazable, que valgo porque han instalado en mí una LUZ divina y porque en mi interior hay mucho para DAR…

Yo quiero hacer conciencia de que nadie puede lastimarme a menos que yo lo permita, que nadie puede agredirme porque no lo merezco…

Yo quiero ser LUZ para mi SOL, mi familia y mis hijos, porque así les ayudaré a crecer sin miedos y con responsabilidad.

Yo quiero dejar de ser y sentirme víctima para retomar o tomar por primera vez en mi VIDA la capacidad de auto gobernarme, de ser protagonista de mi historia…

Yo quiero AMAR el presente, elegir el futuro y luchar para hacerlo, con el corazón sin renunciar ni cansarme jamás…

Yo quiero recordar el pasado, pero no vivir en EL, para aprender a no cometer los mismos errores, quiero soñar con un futuro brillante lleno de estrellas, sin dejar de vivir y disfrutar mi presente, teniendo plena conciencia que lo único seguro es el hoy, el aquí y el ahora…

Yo quiero perdonarme mis errores, mis culpas, mis caídas y liberar la carga para hacer más liviano mi caminar hacia una VIDA NUEVA…

Yo quiero, todos los días de mi vida en esta dimensión agradecer cada instante de aliento, cada sonrisa, cada lágrima, cada amigo que me ha dado la mano en mi peregrinaje, cada experiencia vivida que me han hecho SER quien soy, con mis defectos y virtudes…

Yo quiero seguir siendo YO para poder sentir el TU…

 ¡Vamos!

Haz como los pájaros que comienza el día cantando. La música es alimento para el espíritu. Canta cualquier cosa, canta desafinando, pero canta. Cantar dilata los pulmones y abre el alma para todo lo bueno que la vida le ofrece. Si insistes en no cantar, por lo menos escucha mucha música y déjate llevar por ella.

Ríete de la vida, ríete de los problemas, ríete de ti misma. La gente comienza a ser feliz cuando es capaz de reírse de sí misma. Ríete de las cosas buenas que te suceden. Ríete abiertamente para que todos se puedan contagiar de tu alegría.

No te dejes abatir por los problemas. Si procuras convencerte de que estás bien, vas a terminar convenciéndote de que realmente lo estás, y cuando menos lo pienses te vas a sentir realmente bien. El buen humor, así como el mal humor, se contagian. ¿Cual de ellos vas a escoger?

Si estás de buen humor, las personas a tu alrededor también lo estarán y eso te dará más fuerza. Lee cosas positivas. Lee buenos libros, lee poesía, porque la poesía es el arte de aceitar el alma.

Lee romances, historias de amor, o cualquier cosa que haga reavivar tus sentimientos más íntimos, más puros. Practica algún deporte. El peso de la cabeza es muy grande y tiene que ser contrabalanceado con algo!

Además te vas a sentir bien dispuesta, más animado, más joven. Encara tus obligaciones con satisfacción. Es maravilloso disfrutar de lo que se hace. Pon amor en todo lo que está a tu alcance.

Cuando te propongas hacer algo, ¡métete de cabeza! No dejes escapar las oportunidades que la vida te ofrece, ellas no vuelven. No eres Tú que está pasando, son las oportunidades que dejaste ir. Ninguna carrera es infranqueable si estás dispuesta a luchar contra ella.

Si tus propósitos son positivos, nada podrá detenerlos. No dejes que tus problemas se acumulen, resuelve lo antes posible. Habla, conversa, explica, discute, perdona: lo que mata es el silencio, el rencor.

Exterioriza todo, deja que las personas sepan que las estimas, las amas, que las necesitas,
y principalmente en familia.

Vuelve a las cosas duras, dedícate a la naturaleza. Cultiva tu anterior y ella hará que brote belleza de todos tus poros. Tú puedes. Todos podemos.

 Limpieza interior

Estaba necesitando hacer una limpieza en mí…
Tirar algunos pensamientos indeseados.
Lavar algunos tesoros que estaban medio oxidados.
Entonces saqué, del fondo de las gavetas, recuerdos que no uso y no quiero más:

Tiré algunos sueños, algunas ilusiones…
Sonrisas que nunca di.
Tire la rabia y el rencor de las flores marchitas que estaban dentro de un libro que nunca leí.
Miré para mis sonrisas futuras y las alegrías pretendidas, y las coloqué en una cajita, bien ordenadas.

Saqué todo del armario y lo fui tirando al suelo.
Pasiones escondidas, deseos reprimidos. Heridas de un amigo, recuerdos de un día triste. Pero también encontré otras cosas y muy bellas :

Un pajarito cantando en mi ventana.
Aquella luna color plata, el poner del sol.
Me fui encantando y distrayendo, mirando cada uno de aquellos recuerdos.

Arrojé en el cesto, los restos de un amor que me hirió.
Tomé las palabras de rabia y de dolor que estaban en el estante, las tiré en el mismo instante.
Otras cosas que aún me hieren… Veré que haré con ellas.

Fue en aquella gaveta en la que uno guarda lo que es más importante, el amor, la alegría, las sonrisas, un poco de Fe, para los momentos en que necesite.

Recogí con cariño el amor encontrado, doblé ordenados los deseos, coloqué perfume en la esperanza, pasé un paño en el estante de mis metas, y las dejé a la vista, para no olvidar.

Coloqué en los estantes de abajo, algunos recuerdos de infancia.

En la gaveta de encima, las de mi juventud y colgado bien a mi frente, coloqué las de mi capacidad de amar
y principalmente las de RECOMENZAR.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

 

 

 

LAS MUJERES SON LA CHISPA DE LA VIDA

Dios creó a la mujer

Sin las mujeres no existiría San Valentín, no habría día de la madre, no se celebrarían cumpleaños, no habría día del padre y muchos menos día del amor

Para cuando Dios hizo a la mujer, ya estaba en su sexto día de trabajo de horas extras. Un ángel apareció y le dijo: ¿Por qué pones tanto tiempo en esta?
Y El Señor contestó: ¿Has visto mi Hoja de Especificaciones para ella?

Debe ser completamente lavable, pero no ser de plástico, tener más de 200 piezas movibles, todas cambiables y ser capaz de funcionar con una dieta de cualquier cosa y sobras, tener un regazo que pueda acomodar cuatro niños al mismo tiempo, tener un beso que pueda curar desde una rodilla raspada hasta un corazón roto y lo hará todo con solamente dos manos.

El ángel se maravilló de los requisitos. ¡Solamente dos manos….Imposible! ¿Y este es solamente el modelo estándar? Es demasiado trabajo para un día…Espera hasta mañana para terminarla.
No lo haré, protestó el Señor. Estoy tan cerca de terminar esta creación que es favorita de Mi propio corazón.

Ella ya se cura sola cuando está enferma Y puede trabajar días de 18 horas.” El ángel se acercó más y tocó a la mujer.
“Pero la has hecho tan suave, Señor “Es suave”, dijo Dios, pero la he hecho también fuerte. No tienes idea de lo que puede aguantar o lograr.¿Será capaz de pensar? preguntó el ángel.

Dios contestó: “No solamente será capaz de pensar sino que razonar y de negociar”
El ángel entonces notó algo y alargando la mano tocó la mejilla de la mujer….
“Señor, parece que este modelo tiene una fuga…
Te dije que estabas tratando de poner Demasiadas cosas en ella”
“Eso no es ninguna fuga… Es una lágrima” lo corrigió El Señor.
“Para qué es la lágrima,” preguntó el ángel.

Y Dios dijo: “Las lágrimas son su manera de expresar su dicha, su pena, su desengaño, su amor, su soledad, su sufrimiento, y su orgullo.”
Esto impresionó mucho al ángel “Eres un genio, Señor, pensaste en todo. La mujer es verdaderamente maravillosa”

¡Lo es!
La mujer tiene fuerzas que maravillan a los hombres.
Aguantan dificultades, llevan grandes cargas, pero tienen felicidad, amor y dicha.
Sonríen cuando quieren gritar.
Cantan cuando quieren llorar.
Lloran cuando están felices y ríen cuando están nerviosas.
Luchan por lo que creen.
Se enfrentan a la injusticia.
No aceptan “no” por respuesta cuando ellas creen que hay una solución mejor.
Se privan para que su familia pueda tener.
Van al médico con una amiga que tiene miedo de ir.
Aman incondicionalmente.
Lloran cuando sus hijos triunfan y se alegran cuando sus amistades consiguen premios.
Son felices cuando escuchan sobre un nacimiento o una boda.
Su corazón se rompe cuando muere un persona querida.
Sufren con la pérdida de un ser querido, sin embargo son fuertes cuando piensan que ya no hay más fuerza.
Saben que un beso y un abrazo pueden ayudar a curar un corazón roto.

Sin embargo, hay un defecto en la mujer: ¡ES QUE SE OLVIDA DE CUÁNTO VALE!

El valor de la mujer

Cuenta la leyenda que al principio del mundo, cuando Dios decidió crear a la mujer, encontró que había agotado todos los materiales sólidos en el hombre y no tenía más de que disponer.

Ante este dilema y después de profunda meditación, hizo esto:
Tomo la redondez de la luna, las suaves curvas de las olas, la tierna adhesión de la enredadera, el trémulo movimiento de las hojas, la esbeltez de la palmera, el tinte delicado de las flores, la amorosa mirada del ciervo, la alegría del sol y las gotas del llanto de las nubes, la inconstancia del viento y la fidelidad del perro, la timidez de la tórtola y la vanidad del pavo real, la suavidad de la pluma de un cisne y la dureza del diamante, la dulzura de la paloma y la crueldad del tigre, el ardor del fuego y la frialdad de la nieve.

Mezclo tan desiguales ingredientes, formó a la mujer y se la dio al hombre.

Después de una semana, vino el hombre y le dijo: ¡Señor, la criatura que me diste me hace desdichado, quiere toda mi atención, nunca me deja solo, charla incesantemente, llora sin motivo, parece que se divierte al hacerme sufrir y vengo a devolvértela porque no puedo vivir con ella!!

Bien, contestó Dios y tomó a la mujer.

Pasó otra semana, volvió el hombre y le dijo: Señor, me encuentro muy solo desde que te devolví a la criatura que hiciste para mí, ella cantaba y jugaba a mi lado, me miraba con ternura y su mirada era una caricia, reía y su risa era música, era hermosa a la vista y suave al contacto. Me cuidaba y protegía cuando lo necesitaba, me daba dulzura, ternura, comprensión y amor sin condiciones, por favor Dios, devuélvemela, ¡¡¡porque no puedo vivir sin ella!!!

Ya veo, dijo Dios, ahora valoras sus cualidades, eso me alegra mucho, claro que puedes tenerla de nuevo, fue creada para ti, pero no olvides cuidarla, amarla, respetarla y protegerla, porque de no hacerlo, corres el riesgo de quedarte de nuevo sin ella.

Ser mujer

Nada más contradictorio que ser mujer…
Mujer que piensa con el corazón, actúa por la emoción y vence por el amor.

Que vive un millón de emociones en un solo día, y transmite cada una de ellas con una sola mirada.

Que vive buscando la perfección y vive tratando de buscar disculpas para los errores de aquellos a quienes ama.

Que hospeda en el vientre otras almas, da a luz y después queda ciega, delante de la belleza de los hijos que engendró.

Que da las alas y enseña a volar pero no quiere ver partir los pájaros, aún sabiendo que no le pertenecen.

Que se arregla toda y perfuma la cama, aunque su amor no perciba más esos detalles.

Que como una hechicera transforma en luz y sonrisa los dolores que siente en el alma, solo para que nadie lo note.

Y aún tiene fuerzas, para dar consuelo a quien se acerca a llorar sobre su hombro.

Feliz del hombre que tan solo por un día sepa, entender el alma de la mujer.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

 

 

VIVE ALEGRE AUNQUE LLORES

Recetas para ser felices

1. Haz felices a otros. Crear felicidad nos hace mejores y más felices. Tu vida es lo que has dado.

2. Comparte los Domingos con la familia.

3. Olvídate rápido de lo negativo. La necesidad de hablar mal del otro indica una baja autoestima, es decir: yo me siento tan abajo que en vez de subir, bajo al otro.

4. Da y recibe amor, la gente necesita establecer conexiones significativas con otras personas para sentir verdadera alegría.

Las personas solitarias

El hombre siempre necesitará al hombre. Se equivoca de lleno quien pretenda desdeñar a sus semejantes, evitando estar cerca de quienes se encuentren desamparados y faltos de calor humano. Nuestras obras son las que mejor hablan de nosotros. Es una gran verdad que nadie es más que nadie si no hace cuanto puede por sus semejantes .

La verdadera felicidad

La alegría está en la lucha, en el esfuerzo, en el sufrimiento que supone la lucha, y no en la victoria. Hablo de ser felices. Para “estar” felices, solo hace falta ir por la vida acumulando placeres y evitando sufrimientos a cualquier costo.

La felicidad tiene que ver con saber que quiero hacer con mi vida. El que no sabe lo que quiere no puede ser feliz. Cada día está lleno de posibilidades, si sabemos leerlo adecuadamente. Podemos convertirlo en un valle de lágrimas o en un paraíso. Cambiemos ahora, antes de que sea tarde.

Los multimillonarios con patrimonios por encima de los 100 millones de dólares, con grandes mansiones, yates y aviones privados, tan solo se sienten ligeramente más felices que el ciudadano medio. Lo que si influye son los demás: cuanto más feliz es alguien, más desea comunicar su estado a quienes le rodean, y cuando más hundido está, más necesita de una compañía que le ayude a salir de ese estado. Nadie puede ser feliz solo.

La mayoría de la gente mide su felicidad en términos de placer físico y posesión material. Si la felicidad se pudiera medir y palpar, yo que no puedo ver ni oír, tengo todos los motivos para sentarme en una esquina y llorar sin parar. Si a pesar de mis privaciones, soy feliz. Si mi felicidad es tan profunda que se convierte en una filosofía de vida, entonces resulta que soy una persona optimista por elección.

Cuenta tu vida por tus sonrisas, no por tus lágrimas.

A la noche le sigue el día, como a la tempestad la calma. Así es la naturaleza y tú formas parte de ella. Por eso, toma conciencia de tus sentimientos y de tus estados anímicos y de cómo alternan los buenos con los regulares y los pésimos. Acepta que las cosas sean así y no te tomes demasiado en serio esas variaciones y alternancias… Vivir es cambiar .

Disfruta de la travesía y del paisaje porque tu felicidad no está al extremo del camino, sino que el mismo camino es la causa de tu felicidad.

Llena la mochila de tu alma de gozo por vivir. Acostúmbrate cada día a llenar tu alma, tu mente, tu corazón, tu piel y tus sentimientos de abundantes provisiones de paz, de gozo por vivir, de amor a la vida, de abrazos, de besos, de risas, de caricias, de miradas de complicidad y de ternura.

No concibo una vida en plenitud si no es viviendo para amar y amando para vivir. No conozco una razón más poderosa para vivir que el amor. El sentido de la vida reside en vivir para amar y amar para vivir, si rechazamos este mandamiento estaremos poniéndoselo cada vez más difícil a la felicidad. El amor es una asignatura y como tal se puede aprender. Para dominar es necesario comprender, asimilar y practicar

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

 

ESTADOS DE ANIMO

 LLORAR O REÍR ¿POR QUÉ PRIVARNOS DE ELLO?

“Una situación dolorosa y una emoción de tristeza son necesarias para mantener un equilibrio. Comprender que vamos a atravesar por ellas nos dará la fortaleza para superarlas, aprender de las mismas y saber que vendrán muchas más, lograr el equilibrio entre las emociones es la tarea que todos tenemos para vivir una vida plena emocionalmente”.

La tristeza también nos ayuda a reorientar nuestros objetivos, reflexionar sobre nosotros mismos, a tomar decisiones, así como buscar apoyo y pedir ayuda a nuestros seres queridos… Igualmente ocurre con las otras emociones: el miedo nos ayuda a huir del peligro, la ira nos incita a luchar y el asco o disgusto, nos hace rechazar cosas que nos pueden hacer daño.

En definitiva, todas las emociones tienen algo que enseñarnos acerca de nosotros mismos, y sin ellas jamás sabríamos lo que es la felicidad.

Es conveniente permitirnos los estados de tristeza, aunque hay que vigilar no quedarnos atrapados en ellos

Si desterramos la tristeza… ¿Cómo se curarán las heridas?

Derramar lágrimas no es perjudicial. Gracias a ellas, se liberan las hormonas del bienestar que ayudan a disminuir los niveles altos de angustia y que actúan como un calmante natural de las emociones intensas. Y, después del llanto, llega la calma y se entra en un estado de relajación.

Cuando lloramos, el cuerpo libera tensión, esa tensión que sentíamos como angustia. Por eso luego de llorar nos sentimos así de bien, así de relajados. Porque ya no cargamos con ese peso emocional. El llanto ayuda a superar los problemas y a veces llorar un solo día no es suficiente, quizás la tristeza de, por ejemplo, la pérdida de un ser amado se extienda por días y hasta semanas. Pero si lloramos cada vez que lo sentimos sin contenernos, probablemente superemos antes la pena.

El llanto es el primer paso para estar mejor. Reprimirlo es querer seguir mal, angustiado, afligido. El reprimir los sentimientos es sumamente nocivo para la salud mental y hasta física. Produce ansiedad y depresión. Nos hace aislar, alejar de amigos y familiares.

La tristeza te fuerza a mirar esas partes de ti misma que no están sanas todavía.

Si puedes mirar a la tristeza como una enseñanza, crecerás. El dolor de la tristeza no es el único maestro en esta vida, pero si es observado adecuadamente, con conciencia y el corazón abierto, es uno de los más grandes maestros de todos. Las semillas de la sabiduría y la iluminación están plantadas dentro de las heridas de la tristeza. Lo que se ha perdido solo puede regresar a nosotros nuevamente de un modo superior.

Aunque las cosas no cambien por una lágrima, siempre podemos y en eso estarán de acuerdo conmigo, retomar con más calma, el empeño de la vida…

Los remedios naturales para luchar contra ella muchas veces están dentro de nosotros mismos. El primero, por no decir el único, es no tomarse a uno mismo demasiado en serio. Tristeza en modo alguno es sinónimo de pesimismo, al contrario, soy de los que apuesta a que la tristeza sonriente le ganará la partida a la pena y a la amargura. Eso sí, es necesario evitar que la tristeza se convierta en una postura cómoda de desintegración paulatina soportable.

Recuerda que tanto la alegría como la tristeza son emociones básicas del ser humano y ambas deben sentirse y vivirse intensamente.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

CADA PERSONA ES ÚNICA

El agua que quería ser fuego

Ya estoy cansada de ser fría y de correr río abajo. Dicen que soy necesaria. Pero yo preferiría ser hermosa. Y encender entusiasmos. Y hacer arder el corazón de los enamorados y ser roja y cálida.

Dicen que yo purifico lo que toco, pero más fuerza purificadora tiene el fuego. Quisiera ser fuego y llama.

Así pensaba el agua de un río de montaña. Y, cómo quería ser fuego, decidió escribir una carta a Dios y pedir que cambiara su identidad.

“Querido Dios: tú me hiciste agua, pero quiero decirte con todo respeto que me he cansado de ser transparente. Prefiero el color rojo para mí. Desearía ser fuego. – ¿Puede ser?.

Señor, tú mismo te identificaste con la zarza ardiente y dijiste que habías venido a poner fuego en la tierra. No recuerdo que nunca te compararas con el agua. Por eso, creo que comprenderás mi deseo. No es un simple capricho. Yo necesito este cambio para mi realización personal”.

El agua, salía todas las mañanas a su orilla para ver si llegaba la respuesta de Dios. Una tarde pasó una lancha muy blanca como la nieve y dejó caer al agua un sobre muy rojo.

El agua lo abrió y lo leyó:
“Querida hija: me apresuro a contestar tu carta. Parece que te has cansado de ser agua, yo lo siento mucho porque no eres un agua cualquiera. Tu abuela fue la que me bautizó en el Jordán, y yo te tenía destinada a caer sobre la cabeza de muchos niños. Tú preparas el camino del fuego. Mi Espíritu no baja a nadie que no haya sido lavado por ti. El agua es siempre primero que el fuego.”

Mientras el agua estaba embebida leyendo la carta, Dios bajó a su laso y la contempló en silencio. El agua se miró a sí misma y vio el rostro de Dios reflejado en ella.

Y Dios seguía sonriendo, esperando una respuesta.
Ella comprendió que el privilegio de reflejar el rostro de Dios, solo lo tiene el agua limpia.
Suspiró y dijo:“Sí Señor, seguiré siendo agua, seguiré siendo tu espejo. Gracias.”

MORALEJA: Aceptemos quien realmente somos. Cada uno de nosotros es único, peculiar y muy especial. ¡Amémonos!
– Muchas veces no estamos conformes con lo que somos y anhelamos ser como otros pensando que no somos capaces de lograr lo que estos otros han logrado. Nos olvidamos que Dios nos ha dado la capacidad para transformar al mundo que nos rodea. Solo necesitamos ponernos en Sus manos y estar dispuestos a que Dios haga la obra a través de nosotros.

Aceptemos lo que somos

En esta vida hay muchísimos ejemplos de personas que lograron transformar vidas siendo lo que eran. Personas que lo “poco” que eran ante los ojos de los demás y quizás ante los suyos, se convirtió en un tesoro inigualable en las manos de Dios.

Este texto nos explica lo injusto que podemos ser al no valorar lo que tenemos y querer ser siempre ser ” el otro”lo primero que debemos evitar son las comparaciones y si lo hacemos que sea con personas que tengan metas a nuestro alcance si no solo alcanzaremos frustación

Dedícate a conocerte mejor, siempre tenemos tiempo para pararnos a reflexionar que somos y que queremos y para donde vamos, analiza todo estas preguntas y verás como tu mente y corazón te dará respuestas que te sorprenderán

Piensa siempre en positivo no resaltes lo negativo que habita en ti, todos tenemos defectos y virtudes pero somos lo que pensamos y nuestro carácter se forja de ese pensamiento.

Siempre tenderemos a estar insatisfechos porque es una regla motivaciones básica: Motivarse es moverse y para moverse hay que tener cierto desequilibrio y cierta inquietud.

La capacidad está en ti, no hay excusa que valga: solo tienes que salir ahí fuera y demostrarte que tú estás aquí para ser feliz.

 La envidia no es la admiración que sentimos hacia algunas personas, ni la codicia por los bienes ajenos, ni el desear tener las dotes o cualidades de otro. Es otra cosa.

        La envidia es entristecerse por el bien ajeno. Es quizá uno de los vicios más estériles y que más cuesta comprender y, al tiempo, también probablemente de los más extendidos, aunque nadie presuma de ello (de otros vicios sí que presumen muchos).

        La envidia va destruyendo —como una carcoma— al envidioso. No le deja ser feliz, no le deja disfrutar de casi nada, pensando en ese otro que quizá disfrute más. Y el pobre envidioso sufre mientras se ahoga en el entristecimiento más inútil y el más amargo: el provocado por la felicidad ajena.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

UN BELLO CORAZÓN

Pasar la vida 

Un joven estaba en el centro de la ciudad, proclamando tener el corazón más bello de la región, una multitud lo rodeó y todos admiraron su corazón, no había marcas ni cualquier otro defecto. Todos estuvieron de acuerdo en que aquel era el corazón más bello que hubiesen visto.
El joven estaba muy orgulloso de su bello corazón, de repente, un anciano apareció frente a la multitud y dijo:¿por qué el corazón del joven no es tan bonito como el mío? La multitud y el joven miraron hacia el corazón del anciano, que estaba latiendo con vigor, pero tenía muchas cicatrices, tenia lugares en que se habían removido pedazos habiéndose colocado otros en su lugar, pero estos no encajaban bien, causando muchas irregularidades, en ciertos puntos del corazón, faltaban pedazos.
El joven al ver el corazón del anciano, dijo: Usted debe estar bromeando… Compare nuestros corazones, el mío está perfecto, ¡y el suyo es una mezcla de cicatrices y agujeros! ¡Así es!, dijo el anciano. Viéndolo, tu corazón parece perfecto, pero yo no cambiaría el mío por el tuyo, mira, cada cicatriz representa una persona a la cual le di mi amor, tomé un pedazo de mi corazón y se lo di a cada una de esas personas, muchas de ellas me dieron un pedazo de su propio corazón para que lo pusiera en el mío, pero, como los pedazos no eran exactamente iguales, posee irregularidades, pero yo los quiero porque me traen recuerdos del amor que compartimos.

Algunas veces di pedazos de mi corazón a quien no me retribuyó, por eso tiene agujeros, y duelen. Permanecen abiertos, recordándome el amor que sentí por esas personas.
Espero que un día ellas me correspondan, llenando ese vacío.¿ Que te parece joven? ¿Ahora entiendes en qué consiste la verdadera belleza? El joven se quedó callado y las lágrimas rodaron por su rostro, se aproximó al anciano, arrancó un trozo de su perfecto y joven corazón y se lo ofreció al anciano, quien retribuyó el gesto.
El joven miró su propio corazón, que ya no era perfecto como antes, sino más bello que nunca, los dos se abrazaron y se fueron juntos.

Cómo debe ser triste pasar la vida con el corazón intacto, esta es tu oportunidad de quitarte un pedazo de tu corazón y enviárselo a la persona que quieras, o no hacerlo, y dejar tu corazón intacto…¡Yo me quité un pedacito especialmente para ti!.

Examinad el corazón

Me quedé viuda muy joven y con tres hijos pequeños. . Para ayudarme económicamente, alquilaba una habitación cerca del hóspìtal a algunos pacientes que vivían fuera y buscaban dónde quedarse mientras duraba su tratamiento.

Una tarde de verano mientras preparaba la cena, escuché que llamaban a mi puerta. Abrí y vi a un anciano verdaderamente repugnante.

Es un poco más alto que mi hijo de ocho años.– Pensé mientras miraba su cuerpo pequeño y arrugado. Lo más aterrador era su rostro, deformado a causa de la hinchazón, y las heridas que todavía estaban en carne viva. Sin embargo, su amable y dulce voz contrastó radicalmente el escenario cuando dijo:

—Buenas noches. He venido a ver si usted tiene una habitación disponible tan solo por una noche. He venido esta mañana desde la costa para un tratamiento y no hay ningún autobús de vuelta hasta mañana temprano.

Luego, me comentó que había estado buscando un cuarto por varias horas pero que no había tenido éxito, pues al parecer nadie tenía habitaciones disponibles.

—Debe ser por mi rostro…sé que se ve horrible, pero mi doctor dice que con algunos tratamientos más…

Por un momento vacilé en aceptarlo como huésped, pero sus siguientes palabras me convencieron:

—Puedo dormir en esta mecedora, aquí afuera, en la entrada. Mi autobús sale mañana en la mañana.

Le dije que teníamos una cama preparada, y que pasara a la habitación si lo deseaba. Mientras tanto, entré y terminé de hacer la cena. Cuando estuvo todo listo le pregunté al anciano si le gustaría cenar.

—No, gracias. Tengo suficiente – Y levantó una bolsa de papel marrón, donde según él guardaba una “suculenta” cena que se había preparado la noche anterior. Yo le hice ademán de que pasara al comedor a cenar conmigo y mis hijos; lo cual hizo encantado.

Cuando terminé de lavar los platos, salí al comedor para hablar con él algunos minutos. No era muy difícil darse cuento que este hombre tenía un inmenso corazón. Me dijo que pescaba para mantener a sus seis hijos y a su esposa, quien había quedado inválida por un problema en la columna. No lo contaba para quejarse; de hecho usaba mucho el “gracias a Dios…”. Estaba agradecido de no sentir dolor alguno por su enfermedad, que era aparentemente algún tipo de cáncer de piel. Sobre todo, agradecía mucho a Dios por la fortaleza que le daba para poder seguir adelante.

Después de una larga y amena charla, se despidió y pasó a su dormitorio.

Cuando me levanté en la mañana, vi que la puerta de la habitación estaba abierta, las sábanas estaban perfectamente dobladas y el pequeño hombrecito estaba fuera en la entrada, esperando. No quiso tomar desayuno, pero poco antes de que se fuera, y como si pidiese un gran favor, me preguntó:

—¿Podría quedarme aquí la próxima vez que reciba el tratamiento? No le incomodaré en lo más mínimo. Puedo dormir cómodamente en una silla.

Se detuvo un momento y luego añadió:

—Sus niños me hacen sentir en casa. A los adultos les asusta mi rostro, pero a los niños parece no importarles.

Le dije que sería bienvenido en cualquier ocasión.

En su siguiente visita llegó poco después de las siete de la mañana. Trajo de regalo un gran pescado y unos pulpos gigantescos. Dijo que los había pescado esa misma noche para que estuvieran frescos y deliciosos. Yo sabía que su bus salía a las 4:00 a.m y me preguntaba cuándo habría dormido el pobre hombre.

Durante los años que vino a quedarse con nosotros siempre nos traía pescados o vegetales de su jardín. Sus regalos tenían doble valor sabiendo cuán pobre era el anciano. Cuando recordaba estas cosas, pensaba en un comentario que hizo nuestro vecino después que partió aquella primera mañana.

—¿Alojaste a ese repugnante hombre anoche? ¡Yo lo rechacé! ¡Puedes perder clientela recibiendo tal gente!

Probablemente haya perdido clientela, pero sé que mi familia estará siempre agradecida de haberlo conocido. Aprendimos de él a aceptar sin quejas lo malo y a agradecer a Dios lo bueno.

Recientemente estaba visitando a una amiga que tiene un vivero. Me estaba mostrando sus flores hasta que llegamos a la más bella de todas: un crisantemo dorado floreciendo. Pero para mi sorpresa, estaba creciendo en un viejo bote oxidado y abollado.

Yo pensé,

—Si esta fuera mi planta, la pondría en la mejor maceta que tuviera mi amiga me hizo cambiar de parecer.

—Me quedé sin macetas– me explico- y sabiendo cuán bella sería esta flor, pensé que no importaría que brotara en este viejo bote. Era solo por un corto tiempo hasta que la pudiera poner en el jardín.

Ella se debe haber preguntado por qué sonreí, pero me estaba imaginando esta escena en el cielo:

—Aquí está uno especialmente hermoso, debe haber dicho Dios al encontrarse con el espíritu del viejo pescador. Estoy seguro de que no le importará empezar en este pequeño y deforme cuerpo.

A veces los hombres somos muy injustos a la hora de emitir nuestros juicios. Tendemos a juzgar rápidamente, y además, por las apariencias. ¡Con qué facilidad rechazamos a una persona porque en la primera impresión no nos gustó! ¡Qué sería de nosotros si Dios juzgara con tanta ligereza! Afortunadamente, Dios mira el corazón. Aprendamos también nosotros a hacer lo mismo.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

RECUPERAR LA VIDA

Un móvil no reemplace al corazón

Me resisto a no comentar en la mesa en familia, lo rica que está la sopa por no poner atención ni al los sabores solo al tacto del móvil.

 Me resisto a pasar horas sin sentido mirando una pantalla.

Me resisto a no ver atardeceres por falta de tiempo, solo por haberlo perdido”vía Internet”.

Me resisto a la falta de abrazos porque la calidez de la piel ya no es lo primordial, importa el tacto de un móvil duro y frío que te hace comunicar con personas lejanas que ni conoces, ignorando a quién te acompaña que se muere por darte cariño cada día.

 Me resisto, quiero volver donde te despertabas e ibas directamente a desayunar con la familia y no ahora… Donde en la cama chateando se está mejor, te levantas mediodía sin salir de tu cuarto para estar más tiempo en soledad, hablando con personas que le importas un carajo.

Me resisto a perder momentos a perder vida a perder salud a perder el eco de las palabras que miran a los ojos, me resisto a querer de verdad “no solo cuando interesa”pasear al perro con tu padre porque le das importancia no porque se fue Internet por un rato y tienes que pasar el rato como sea “aunque sea en familia”

Me resisto a querer a ratos a que me quieran a momentos, quiero todo, la vida pasa, nosotros pasamos, el final llega y perdimos la vida mirando pantallas mirando plasmas mirando estados, “miremos la vida” miremos lo que importa.

¡No te distraigas!

El corazón no se llena con vistos en línea, se llena con un beso o un abrazo, se llena con un TE QUIERO o un TE AMO.

¡Me resisto! Quiero un mundo donde la hora la mires en el reloj no en un móvil y así aprovechar y darle un repaso a todas las redes posibles no vaya a ser que se te escape algo y destruya tu vida. ¡Estamos locos!

Me resisto a la mediocridad, donde todo lo fácil es lo que atrae y lo complicado ya lo harán otros “mi vida más cómoda”.

Me resisto a pasar días con la mente en blanco ocupando solo para mirar y mirar una pantalla que llena la vida de vacíos y elimina emociones con las personas piel a piel, miradas cómplices, ratos ámenos paseando, personas y momentos que nunca podrás recuperar.

Me resisto a que un día te despiertes y te des cuenta que perdiste tanto, tanto… Que solo te quedan recuerdos virtuales que ni en el corazón queda, Se fueron a la mente donde la cultura debería ocupar ese lugar.

¿De verdad los humanos evolucionamos?

¡No lo creo! Cuando nos pasamos media vida subiendo fotos para fingir una vida perfecta. Cuando todavía tienes lagrimas en los ojos,   la ultima pelea con tus padres por la poca atención que le ofreces. Pero tus amigos envidia tu vida y eso es lo que realmente importa.

Podrás comprar todo menos el tiempo

Hasta que no te valores a ti mismo no valoraras tu tiempo. Y hasta que no valores tu tiempo no harás nada de con él.

Cuando comienzas algo, no malgastes el tiempo buscando problemas antes de tenerlos. Si los hay, ya los encontrarás.

Trata siempre de disfrutar lo que estés haciendo y no malgastes el tiempo lamentándote por lo que no te dio tiempo a hacer.

No es breve la vida, largo es en el hombre el descuido del tiempo.

Tu tiempo es limitado, así que no lo malgastes viviendo la vida de otro… Vive tu propia vida. Todo lo demás es secundario.

Deja de actuar como si la vida es un ensayo. Vive este día como si fuera el último. El pasado ya se ha ido. El futuro no está garantizado.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

El VALOR DEL TIEMPO

¡No te duermas! Haz tus sueños realidad

Bendito tiempo que perdemos en dudas, falsas ilusiones, enfados por orgullo, rencores que solo hacen que llevemos carga negativa, distancias que solo se arreglan dando pasos y sobre todo el “Ya lo haré…” Y nunca llega porque confiamos en que tenemos un futuro infinito. No te mientas, sabes que te queda poco tiempo. La vida es un suspiro, un grano de arena, un pez en el mar. El tiempo pasa y el tic tac del reloj jamás deja de sumar.

Tiempo Vivido 

Esto era un hombre que vagaba por el mundo viajando y viendo nuevas bellezas.
Un día fue a un pueblo, había un valle… Entró, era un cementerio.
Miró una lápida y comprobó que era de un niño de 8 años, el hombre se asustó siguió mirando y era un niño de 5, otro de 6…
El hombre aterrado y desolado se sentó en una piedra y comenzó a llorar pues miró todo el valle y la persona con mayor edad no superaba los 12 años.
Llego el cuidador del cementerio y le pregunto:
¿Es por algún familiar?

No señor, vera usted ¿Que maldición es la que hay aquí para que todos los niños mueran? ¿Una plaga? ¿Una enfermedad?
El cuidador sonrió y le dijo:
Tranquilícese, aquí nunca mueren los niños, verá:
Hay una tradición, desde que un chico cumple los 15 años le dan una libreta, se la cuelgan al cuello y cada vez que disfrutan de algo intensamente se apuntan cuanto duró y que fue… El primer beso, el primer amor, una fiesta con sus amigos…
Cuando mueren miramos en su libreta y sumamos todos los momentos que apuntó, porque en este pueblo pensamos que el tiempo disfrutado intensamente es el tiempo realmente vivido.

Para vivir aprendiendo

A los 5 años, aprendí que a los peces dorados no les gustaba la gelatina.
A los 9, aprendí que mi profesora solo me preguntaba cuando yo no sabía la respuesta.
A los 10, aprendí que era posible estar enamorado de cuatro chicas al mismo tiempo.
A los 12, aprendí que, si tenia problemas en la escuela, los tenía más grandes en casa.
A los 13, aprendí que, cuando mi cuarto quedaba del modo que yo quería, mi madre me mandaba a ordenarlo.
A los 15, aprendí que no debía descargar mis frustraciones en mi hermano menor, porque mi padre tenía frustraciones mayores y la mano más pesada.
A los 20, aprendí que los grandes problemas siempre empiezan pequeños.
A los 25, aprendí que nunca debía elogiar la comida de mi madre cuando estaba comiendo algo preparado por mi mujer.
A los 27, aprendí que el titulo obtenido no era la meta soñada.
A los 28, aprendí que se puede hacer, en un instante, algo que te va a hacer doler la cabeza la vida entera.
A los 30, aprendí que cuando mi mujer y yo teníamos una noche sin chicos, pasábamos la mayor parte del tiempo hablando de ellos
A los 33, aprendí que a las mujeres les gusta recibir flores, especialmente sin ningún motivo.
A los 34, aprendí que no se cometen muchos errores con la boca cerrada.
A los 38, aprendí que, siempre que estoy viajando, quisiera estar en casa; y siempre que estoy en casa me gustaría estar viajando.
A los 39, aprendí que puedes saber que tu esposa te ama cuando quedan dos croquetas y elige la menor.
A los 42, aprendí que, si estás llevando una vida sin fracasos, no estas corriendo los suficientes riesgos.
A los 44, aprendí que puedes hacer a alguien disfrutar el día con solo enviarle una pequeña postal.
A los 47, aprendí que niños y abuelos son aliados naturales.
A los 55, aprendí que es absolutamente imposible tomar vacaciones sin engordar cinco kilos.
A los 63, aprendí que es razonable disfrutar del éxito, pero que no se debe confiar demasiado en él. También a los 63, aprendí que no puedo cambiar lo que pasó, pero puedo dejarlo atrás.
A los 64, aprendí que la mayoría de las cosas por las cuales me he preocupado nunca suceden.
A los 67, aprendí que si esperas a jubilarte para disfrutar de la vida, esperaste demasiado tiempo
A los 71, aprendí que nunca se debe ir a la cama sin resolver una pelea.
A los 72, aprendí que, si las cosas van mal, yo no tengo por qué ir con ellas.
A los 76, aprendí que envejecer es importante.
A los 91, aprendí que amé menos de lo que hubiera debido.
A los 92, aprendí que todavía tengo mucho para aprender.

Moraleja

Siempre estamos aprendiendo algo nuevo, algo lindo, algo digno, como por ejemplo que la paz no se logra si realmente no se está dispuesto a perdonar por ella, entender cuál es la verdadera importancia de la familia, de la gente simple, de la vida misma. Que si bien todos tenemos distintas cualidades, capacidades y habilidades, sepamos valorar las que tenemos y podemos ofrecer a los demás y además enriquecernos, aceptar y disfrutar con las que otros no pueden brindar. Saber aceptar nuestras limitaciones y no olvidarnos de nuestras metas, aunque muchas veces parezcan muy lejanas difíciles. Encaminarse hacia ellas es el primer paso hacia algo que ni siquiera podemos imaginar.
Realmente no tiene mucha importancia hasta qué edad vivimos, lo importante es sentir que no lo hemos hecho en vano.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

SER MAYOR NO DA MIEDO, LO QUE DA MIEDO ES NO LLEGAR A SERLO

Admiro las personas mayores

No te dejes vencer tienes muchos años, tu piel rota lo refleja, pero tienes algo que los jóvenes no tienen y es la experiencia, madurez de saber lo que realmente importa en la vida, ya no te ilusiona que ropa ponerte pero te alegra un nuevo amanecer ya no te apetece un corte de pelo de temporada pero sonríes porque tu familia vino a verte. Eres quién levantó tu casa cuando todo se derrumbaba a tus pies, sembraste sonrisa donde caían lagrimas y distes tu tiempo para que tu familia no perdiera el suyo.

Por vuestro amor incondicional deseo que seáis felices, siempre con calidad de vida, por eso os dejo unas recomendaciones que vi por Internet muy útiles para que vuestro cuerpo y mente sigan con fuerza porque el corazón lo tenéis rebosante de amor por los demás:

Envejecer con salud:

-Cuidaras tu imagen cada día.
Viste bien, arréglate como si fueras a una fiesta, qué más fiesta que la vida.

-No te encerrarás en tu casa ni en tu habitación.
Nada de jugar al enclaustrado o al preso voluntario, saldrás a la calle y al campo de paseo, agua estancada se pudre y la máquina inmóvil se enmohece.

-Amaras al ejercicio físico como a ti mismo.
Un rato de gimnasia, una caminata razonable, dentro o fuera de casa. Contra inercia, diligencia.

-Evitaras actitudes y gestos de viejo derrumbado.
La cabeza gacha, la espalda encorvada, los pies arrastrándose, no. Que la gente diga un piropo cuando pases.

-No hablarás de tu vejez ni te quejarás de tus achaques.
Acabarás por creerte más viejo y más enfermo de lo que en realidad estás y te harán el vacío. Nadie quiere estar oyendo historias de hospital.

-Deja de auto llamarte viejo y considerarte enfermo.
Cultivarás el optimismo sobre todas las cosas. Al mal tiempo buena cara, sé positivo en los juicios, de buen humor en las palabras, alegre de rostro, amable en los ademanes. Se tiene la edad que se ejerce. La vejez no es una cuestión de años sino de estado de ánimo.

-Tratarás de ser útil a ti mismo y a los demás.
No eres un parásito ni una rama desgajada voluntariamente del árbol de la vida. Bastate hasta donde sea posible y ayuda con una sonrisa, con un consejo, un servicio.

-Trabajarás con tu mano y con tu mente.
El trabajo es una terapia infalible, cualquier actitud laboral, intelectual, artística. Medicina para todos los males, la bendición del trabajo.

-Convive con todas las edades, niños, jóvenes y adultos, el perfecto muestrario de la vida: luego ensancharás tu corazón a los amigos, con tal que los amigos no sean viejos como tú. Huye del bazar de antigüedades.

-No pensarás que todo tiempo pasado fue mejor.
Deja de estar condenando a tu mundo y maldiciendo tu momento. Alégrate de que, entre las espinas, florecen las rosas. Positivo siempre, negativo, jamás.

-Visitarás al médico. Un chequeo a tiempo te puede quitar de muchos problemas, situaciones que con una revisión al año se pueden localizar. Es una revisión para estar bien, y si encuentran algo, estarán  para cuidarte de manera rápida.

-La importancia de dormir lo suficiente, un  buen  sueño nocturno afecta para mejorar tu salud, permite descansar,  consolidar aprendizajes y  mantener una buena salud mental.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

MATAR A UN NIÑO LO LLAMAN ABORTO

Un texto para reflexionar 

Una mujer con un bebe de brazos muy asustada llega al consultorio de su ginecólogo y le dice:
Doctor: por favor ayúdeme, tengo un problema muy serio. 
Mi bebé aún no cumple un año y ya estoy de nuevo embarazada.
No quiero tener hijos en tan poco tiempo, prefiero un espacio mayor entre uno y otro…..
El médico le preguntó: Muy bien, ¿qué quiere que yo haga?
Ella respondió:
Deseo interrumpir mi embarazo y quiero contar con su ayuda.
El médico se quedó pensando un poco y después de algún tiempo le dice: Creo que tengo un método mejor para solucionar el problema y es menos peligroso para usted.
La mujer sonrió, pensando que el médico aceptaría ayudarla.
Él siguió hablando: Vea señora, para no tener que estar con dos bebés a la vez en tan corto espacio de tiempo, vamos a matar a este niño que está en sus brazos.
Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro niño nazca.
Si vamos a matar, no hay diferencia entre uno y otro de los niños.
Y hasta es más fácil sacrificar este que usted tiene entre sus brazos puesto que usted no correrá ningún riesgo.
La mujer se asustó y dijo: ¡No, doctor! ¡Que horror! ¡Matar a un niño es un crimen!
También pienso lo mismo, señora, pero usted me pareció tan convencida de hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla.
El médico sonrió y después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto.
Convenció a la madre que no hay la menor diferencia entre matar un niño que ya nació y matar a uno que está por nacer, y que está vivo en el seno materno.

Ser madre es un privilegio

A veces la falta de recursos hacen que un nacimiento sea un verdadero problema o inmadurez a la hora de educar cuando aún se es una niña, todo eso es muy razonable no vienen con un pan bajo el brazo no vienen para darnos libertad sino más bien para traer lazos que nos atan pero que lo hacen con un amor infinito que rompe cadenas y problemas.

La vida es un camino lleno de incógnitas y decisiones que nos cambian la vida pero un niño nunca traerá odio, guerras ni rencores trae amor trae dulzura y sonrisas, dale la oportunidad de ser alguien en la vida de dar amor y recibirlo de darte las gracias por ayudarlo a SER y ESTAR.

No detengas su corazón vino para salvarte para darte para besarte, el tiempo todo lo cura pero cuando quiebras una vida que depende solo de ti trae su factura en el tiempo y se paga muy caro con pena e impotencia con insomnio y dolor en el alma por lo que pudo ser y nunca fue.

Que tu vientre sea cuna y no un cementerio

Suena duro pero tristemente es una realidad, es una guerra silenciosa donde los débiles pierden, los que no hablan ni caminan, ni leen ni escriben pero lo que si hacen es SENTIR y SUFRIR.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

 

 

COMO VIVIR CON PAZ EN TU CORAZÓN Y EN TU VIDA

La felicidad está dentro de nosotros

Aquí os dejo unos sencillos y humildes consejos por si los queréis coger para que vuestra mente y alma anden tranquilas y la vida sea un disfrute y no un nido de problemas.

15 CONSEJOS PARA BUSCAR LA FELICIDAD:

1. Viaja casi sin de equipaje: No lleves mochilas en la espalda, ni cargues con pesados lastres. Solo acepta llevar lo indispensable en este viaje que se llama vida.

2. Permanece en el aquí y el ahora. Enfoca tu vida en el momento presente como si no tuvieras pasado, ni memoria, como si no tuvieras futuro.

3. Recuerda que algún día llegará tu muerte: No lo recuerdes un día, ni una semana, ni una temporada.! Es inevitable, tu cuerpo físico morirá, así que no te aferres a nada.

4. Amigate con tu historia Es la única forma de curar tus traumas. Es lo que es. No seas terco tratando de modificar algo que ya es como es.

5. Sé feliz en todas las vivencias de tu vida: Tú no eres tus circunstancias. No te identifiques con tu historia. Regresa a la fuente de la felicidad que es tu alma. Allí vive Dios en ti.

6. Emprende el mejor viaje que puedas realizar: Es el viaje de regreso a ti mismo. Ese viaje que es tu mejor aventura y es también tu conquista y tu legado.
Eres muy importante. Puede ser que seas solo una gota en el océano, pero sin esa gota el océano está incompleto. Vacío de ti. Dios te ha creado por algo. Averigua el por qué.

7. Acepta no saber qué pasará mañana: Vuélvete un nuevo SER cada día, moldea tu vida. Quita  polvo a tus pensamientos viejos y crea unos siempre positivos ante la vida.Intenta ser mas fuerte y mejor persona con cada amanecer.

8. Concede el perdón a todos: No  envenenes el corazón con odios ni rencores.  El que se daña eres siempre tu mismo, y mientras tanto, el mundo sigue girando y tú te enfermas.

9. Ama de la vida: Ama todo lo que el universo te da cada día, desde un pequeño insecto hasta un grandioso árbol. Sé un apasionado de tu hoy, de tus mañanas, de tus tardes, de tus noches.

10. ¡No te enfades!: Te hagan lo que te hagan, te digan lo que te digan, te adulen o te ofendan,  pasa de todo y no hagas lo mismo. Así cortarás el circulo que alimenta dicha agresión.

11. Intenta usar el desapego siempre que puedas: Todo es temporal,todo son momentos que pasan. No puedes controlar la vida de nadie, muerte o desaparición de personas u objetos. Aceptar éste hecho te quita un gran peso de encima!

12. Que el amor sea tu bandera, tu meta y tu guía: Que sea el punto de partida y el de llegada. Pero que sea sobre todo el camino. Vuélvete el amor, renunciando a las mentiras del ego, y abrazando todo lo que te rodea.

13. Para el tiempo un rato.  Medita: Reza, cuida tus espacios y tu entorno de soledad y de silencio. Vacíate de ti, y llenate de Dios!
Aprende a descansar  cada noche para tener un día siguiente situaciones y emociones hechas para que las sepas disfrutar.!

14. Elige siempre la salud: En tus alimentos, en tus pensamientos, en tus emociones, en tus relaciones, en tu mirada, en tu acciones, en tus palabras, en todo elige ser sano. Naciste sano, no elijas enfermarte.

15. Ayuda a los otros a encontrar su camino: No hay mejor regalo, no hay mejor amor. El servicio es alegría.

“Autor desconocido”

Tenemos que vivir cada día de nuestra vida como si fuera el último, ser felices y dejar de lado las quejas y problemas que nos hacen perder tiempo, cada segundo, cada minuto de pena y tristeza es otro minuto perdido en el que podemos estar gozando de la vida.

Sabemos perfectamente que nos daremos cuenta cuando el tiempo pase, cuando ese problema se haga lejano. Pues lo que tenemos que hacer es anticiparnos y mirar de frente al problema con la mente fría y usando la esperanza y el razonamiento para una pronta solución.

Pensemos que cada día que pasa en nuestra vida no vuelve nunca más, es una gran tontería perder un día de la vida en tonterías o sentimientos negativos que no aportan nada, que no suman solo restan.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

NO TENGAS PRISA POR VIVIR

No crezcas, es una trampa.

A diario me encuentro con personas, en el trabajo y en la vida, que no saben más que “cumplir con sus obligaciones”.

Me da flojera pensar siquiera lo tedioso que debe ser ir por ahí, marchando detrás del resto, sin una meta qué alcanzar.

Apresurando el paso para pisarle los talones al de adelante y quizá, hacerlo trastabillar, y apresurar el paso un poco más, solo para ir un metro por delante. ¡Idiotas! ¡¿No se dan cuenta que giran en círculos?! Maldito carrusel de metas perdidas y sueños rotos, de hábitos inculcados y corazón marchito. ¿Dónde quedó el niño que quería ser chef y ahora trabaja en una franquicia de carne con hormonas en forma de hamburguesa? ¿Dónde está la niña que soñaba con ser cantante y ahora está por recibir su título de abogada, “porque se gana bien con ese empleo”? Y no digo que tener un empleo sea malo, digo que si van a hacer algo, que sea algo que los haga sentir vivos, que los haga sentirse bien consigo mismos, y que no limite su amor por la vida, tornándolo en un odio hacia ella misma, por frustraciones o arrepentimientos o porque simplemente la vida no es bella como les enseñaron a vivirla.

Siempre me he preguntado ¿Qué pasa por la cabeza de las personas mientras crecen? Y no me refiero a pensamientos banales, sino, a qué están haciendo y por qué. A lo que debe trascender o genera algún cambio en lo que son y en lo que quieren convertirse. Esas pequeñas (o grandes) cosas que te hacen ser una persona diferente a la que se levantó esta mañana con ganas de mandar todo a la mierda.

Un libro, alguna frase en Internet, un consejo de alguien querido o solo alguien que se cruzó en tu camino el día de hoy. Incluso la reprimenda sobre algo que”ya no deberías hacer” porque, “ya estás grande para esas cosas” o ¿Es que viven en automático todo el tiempo?¿En qué momento cambiaron los sueños de niñez por las preocupaciones de la vida cotidiana?, ¿En qué momento dejaron de ver la vida como un juego?, ¿Cuándo dejaron de brincar en los charcos que se cruzaban por su camino, de trayecto a casa, en un día lluvioso?, ¿Cómo olvidaron la magia de poder soñar despiertos? Uno es amaestrado a base de paradigmas. “Debes estudiar y conseguir un buen empleo”, “Debes tener una mujer y un par de hijos”, “Debes renunciar a tu individualidad por el <bien común>”. Al carajo el bien común, yo necesito estar bien conmigo mismo.

Las personas, erróneamente, creen que madurar es dejar de divertirse, es dejar de hacer las cosas que nos gustan, para hacer las cosas que se deben.

Ellos dicen que crecer es poner los pies en la tierra y dejar de soñar.

Si eso es crecer, prefiero seguir soñando.

El estado necesita personas muertas (en vida) para seguir funcionando.

El mundo, en cambio, solo necesita personas felices. Lucha por lo que te haga feliz, ya sea ser un futbolista, bailarín(a) de ballet o escritor.

Que no te digan que no puedes. Cuando eras chico te enseñaron a levantarte después de los tropiezos.

Si llegas a tropezarte con personas “maduras” o aburridas, levántate de ellas y sigue en pie.

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

EL MAR LO CURA TODO

¿Dónde empieza el final del mar?

Cuando vives en el mar estás lejos de todo.
Tráfico, caos, luces.
Lejos de todo lo demás.
Pero está el mar. Y a él, lo sientes.

¿Dónde empieza el final del mar? O más aún: ¿a qué nos referimos cuando decimos mar? ¿Nos referimos al inmenso monstruo capaz de devorar cualquier cosa o esa ola que espuma en tomo a nuestros pies? ¿Al agua que te cabe en el cuenco de la mano o al abismo que nadie puede ver? ¿Lo decimos todo con una sola palabra o con una sola palabra lo ocultamos todo? Estoy aquí, a un paso del mar, y ni siquiera soy capaz de comprender dónde está él El mar. El mar…

El mar encanta, el mar mata, conmueve, asusta, también hace reír, a veces desaparece, de vez en cuando se disfraza de lago, o bien construye tempestades, devora naves, regala riquezas, no da respuestas, es sabio, es dulce, es potente, es imprevisible. Pero, sobre todo, el mar llama.

Cada vez que estoy delante del mar me abro a los regalos del aire, y los colores y las formas y las vibraciones me entran y salen del pecho con la misma facilidad con la que atraviesan una ventana.

El mar es todo. Cubre siete décimas del globo terrestre. Su aliento es puro y saludable. Es un inmenso desierto, donde el hombre nunca esté solo, porque siente vida por todos los lados.

La cura para todo es siempre agua salada: el sudor, las lágrimas o el mar.

Yo tantas preguntas me hice que me fui a vivir a la orilla del mar heroico y simultáneo y tiré al agua las respuestas para no pelearme con nadie.

Para mí, el mar es como una persona, como un niño al que conozco de hace mucho tiempo. Suena como una locura, lo sé, pero cuando nado en el mar, hablo con él. Nunca me siento sola en esa inmensidad.

Cuando se es frágiles emocionalmente, basta con mirar un panorama, escuchar el sonido del mar y recordar el rostro de las personas con las que hemos estado hasta unos instantes antes.

Mirar el mar de noche como se mira a una madre que duerme. Cuidar cada respiro. Aprender a oír ese hálito que parece decir “Ábrete a las cosas y sueña”.

Los tres grandes sonidos elementales en la naturaleza son el sonido de la lluvia, el sonido del viento en un bosque primitivo y el sonido del océano en una playa.

En el mar la vida es diferente. No está hecha de horas, sino de momentos. Se vive según las corrientes, las mareas, siguiendo el sol.

No se puede ser infeliz cuando se tiene esto: el olor del mar, la arena bajo los dedos, el aire, el viento. 

Cuando mis pensamientos están ansiosos, inquietos y malos, me voy a la orilla del mar, y el mar los ahoga y los manda lejos con sus grandes sonidos anchos, lo purifica con su ruido e impone un ritmo sobre todo lo que en mí es desorientado y confundido.

El océano agita el corazón, inspira la imaginación y trae alegría eterna el alma.

En cada promontorio, en cada playa curva, en cada grano de arena, está la historia de la Tierra.

No debemos perder la fe en la humanidad que es como el océano: no se ensucia porque algunas de sus gotas estén sucias.

Estamos atados al océano. Y cuando volvemos al mar, ya sea para navegar o mirar, volvemos de dónde venimos.

Nunca habrás disfrutado del mundo correctamente hasta que el mar fluya por tus venas y hasta que estés vestido con los cielos y coronado con las estrellas.

En el mar la vida es diferente. No está hecha de horas, sino de momentos. Se vive según las corrientes, las mareas, siguiendo el sol.

A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara esa gota. 

Cuando mis pensamientos están ansiosos, inquietos y malos, me voy a la orilla del mar, y el mar los ahoga y los manda lejos con sus grandes sonidos anchos, lo purifica con su ruido, y impone un ritmo sobre todo lo que en Mí es desorientado y confundido. 

El mar no recompensa a aquellos que están demasiado ansiosos, que son demasiado codiciosos o demasiado impacientes. Uno debe permanecer vacío, abierto y sin opciones, como una playa – a la espera de un regalo del mar.

Salir con la puesta de sol en una playa vacía es verdaderamente abrazar tu soledad.

El mar es todo. Cubre siete décimas del globo terrestre. Su aliento es puro y saludable. Es un inmenso desierto, donde el hombre nunca está solo, porque siente vida por todos los lados.

Me pregunto qué le falta a la vida cuando en una noche de verano el hálito de las estrellas abre las ventanas y os tira dentro el perfume del mar.

Las largas caminatas en la playa son el preludio de una velada romántica. La playa se convierte en una especie de utopía, el lugar donde todos nuestros sueños se hacen realidad.

Después de una visita a la playa, es difícil creer que vivimos en un mundo material. 

 

( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

 

 

LA VIDA ES PURO COLOR

La vida es un bello arco iris

Necesitas tanto del sol como la lluvia, para que aparezcan sus colores.

Creo que todos hemos tenido el privilegio de ver un arco iris y es de las experiencias mas bellas juntos al atardecer que nos ofrece la naturaleza.  

Aquí os dejo un poquito de datos  curiosos de cada color:

El ROJO es el color que representa el amor y la pasión. Es el color de las rosas y la sangre que lleva la vida. El rojo simboliza el poder, la vitalidad, la ambición y la pasión. Si abusamos del color rojo puede volvernos irritables, impaciente e inconformista. El color rojo está asociado con los signos Aries y Escorpio.

El AMARILLO representa la felicidad, el sol y las flores más alegres y brillantes. expresa alegría, felicidad, fortuna; Es un color que despierta inspiración y creatividad, si no es de palabra fácil este cloro le dará ánimo para ser más comunicativo. El color amarillo está asociado los signos con Géminis y Leo.

El VIOLETA representa la paz y la tranquilidad, es también el color de los rayos del sol al amanecer, es un color ligado al mundo espiritual y mágico, proporciona la purificación del cuerpo y la mente; Es también un color que se conecta con la paz y la búsqueda del equilibrio interior.

El NARANJA es el color de la riqueza, la madurez de las frutas, de la cosecha del otoño y de las puestas del sol. Es un color que ayuda transmitir energía positiva, por lo que significa prosperidad, vitalidad, entusiasmo y alegría. El color naranja está asociado al signo Leo.

El VERDE es el color de la naturaleza, de la hierba, de los árboles, de los campos y del bosque. El verde representa la esperanza, la vida y la salud. Meditar con el color verde, es como tomarse un calmante para las emociones. El color verde está asociado a los signos Tauro, Libra, Virgo y Capricornio.

EL ÍNDIGO es un color que comunica sinceridad, respeto, también, simboliza las fantasías y los sueños. Color del amor, la entrega y la espiritualidad. Este color está asociado a los signos Piscis, Acuario y Sagitario.

La vida está llena de lindos colores, pero no todo son tonos bonitos a veces tenemos que lidiar con grises y negros pero aun así la vida no pierde su magia.

AMO LOS COLORES DE LA PRIMAVERA
LOS COLORES DEL VERANO
LOS COLORES DEL OTOÑO
Y LOS COLORES DEL INVIERNO.

La vida es un enorme lienzo, tira toda la pintura que se pueda.