MENTALIDAD DE POBREZA

La pobreza es una actitud

Soy de esas personas raras que piensa que la riqueza no se halla en ningún bien material. No es pobre es quien invierte en el respeto, quien practica la bondad sin mirar a quien. Millonarios son los que cuentan con el respeto y el cariño de sus amigos y familiares, porque la auténtica abundancia no está en el dinero, sino en la felicidad.

Hay gente que, efectivamente, no es pobre por cómo vive, sino por como piensa. Todos conocemos a alguna persona que avanza por la vida con la cabeza alta, ostentando el encumbrado brillo de su posición mientras atiende el mundo con la pátina de la soberbia. En sus corazones no hay empatía, en sus mentes no existe humildad ni cercanía y lo más probable es que tampoco sepan a qué sabe la felicidad.

Ser pobre de mente y corazón

Más allá de lo que pueda parecer, la persona pobre de mente y corazón no abunda tanto como pensamos. La especie sobrevive, el más fuerte puede ser a veces el más noble y el mal no siempre triunfa.

La mayoría de nosotros seguimos siendo reaccionarios ante las injusticias, ante los egoísmos y las vulneraciones. Todo ello nos demuestra por qué actos como el de estas atletas llega a todo el mundo con tanta fuerza

Es como si estas escenas desintoxicaran nuestros corazones para hacernos ver que la bondad, efectivamente, sigue triunfando, y aún más: nos contagia. No obstante, cabe decir que el pobre de mente y corazón no siempre actúa con maldad. Lo que hay en realidad es una falta de receptividad y de empatía.

Son corazones incapaces de ver más allá del elegante ático de su solitario mundo de egoísmos. Es algo que hemos de asumir. No podemos cambiarlos, ni convencerlos, ni aun menos pelear con ellos.

No eres rico porque tengas dinero

No hablo de un parecido físico, sino del intangible: una persona limpia tiene cosas limpias; una persona ordenada, tiene cosas ordenadas. Una persona organizada tiene su vida organizada.
Creo que la persona que quiere hacer mejoras consistentes en su vida, empieza paso a paso, de menos a más. Corrigiendo pequeñas actitudes, pequeñas acciones.
La riqueza es producto del orden, de la previsión, de la limpieza, del respeto al tiempo, de la confianza en uno mismo. No eres rico porque tienes un millón de dólares en la mano, al contrario: puedes tener un millón de dólares en la mano como resultado de ser rico. Esto que voy a decir suena duro y por eso lo escribo con cargo a las críticas: la mayoría de gente con mentalidad de pobreza es sucia, desordenada, son impuntuales, no valoran su tiempo y por eso muchas veces lo desperdician consumiendo televisión basura. Gastan lo poco que tienen en una cerveza, y nunca en un libro. Como ve, no son pobres por el sueldo o por el trabajo que tienen, sino por la forma en cómo se tratan a sí mismos.
Vive a partir de hoy una vida diferente, orden es coherencia y la coherencia arroja resultados inimaginables.”
( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

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