Aprende a no competir
En definitiva, reajusta tus expectativas a tu vida y objetivos realmente importantes para ti.
Quiérete
La auto exigencia ha podido contigo: has pasado de una auto exigencia que te hacía crecer, mejorar, aprender tus fallos y superarte a hablarte mal, señalar tus errores de forma exagerada y menospreciando tus logros. En este punto, en lugar de construir una mejor versión de ti mismo, te estás destruyendo.
Háblate desde el cariño y el respeto, no generalices los errores, ni los exageres, motívate sin presionarte con la tiranía de los «debería» y analiza el error centrándote en cómo mejorar o qué aprender de este. Por supuesto, no olvides valorar tus logros y permitirte recargar las pilas.
Asume que no puedes con todo: tienes un tiempo limitado cada día y no vives por y para trabajar. Elige qué tiempo le quieres dedicar a cada tarea, sin sobrecargarte, disfruta de lo que haces. Aprende a decir que no a las tareas que no son importantes para ti.
Perdónate: no hacerlo todo es normal, cada persona tiene un ritmo, lo importante es el significado que le das a las actividades que haces cada día. Mírate al espejo, dite «gracias por todo lo que haces, no pasa nada si no lo consigues todo, perdón por haberte exigido tanto, lo estás haciendo bien».
Consecuencias si no aceptas tus limitaciones
Baja autoestima: no llegarás a sentirte del todo satisfecho incluso cuando consigues un logro, siempre buscarás más y mucho mejor. En definitiva, sentirás que estás fracasando de manera constante.
Tendencia a la negatividad: puesto que el objetivo es conseguir la perfección, independientemente del resultado y del esfuerzo, nunca disfrutarás de lo conseguido. Pensarás que no eres lo suficientemente bueno para que te salgan bien las cosas. Esto te llevará a anticipar los acontecimientos de un modo fatalista.
Rigidez: verás las cosas en blanco o negro (es decir, sale todo perfecto o sale todo mal). Se te hará difícil ver las situaciones con matices o términos medios lo cual complica el afrontamiento.
Pérdida de autoconfianza: te sentirás inútil porque según tu criterio rígido de perfección o imperfección no estás llegando a tus objetivos y llegarás a pensar que no conseguirás alcanzarlo.
( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)