SEÑOR AYÚDAME

La existencia humana es un soplo

Señor ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes, y no decir mentiras por el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la felicidad.
Si me das fuerza, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me das humildad, no me quites la dignidad.
Ayúdame a ver con bondad el otro lado de la medalla.
Enséñame a respetar a mis hermanos como a mi mismo.
No me dejes engañar en el orgullo soberbio si triunfo.
Ni en la desesperación loca, si toca a mi puerta el fracaso.
Hazme ver que el fracaso, puede ser la antesala del triunfo.
Enséñame que perdonar; es lo más grande del fuerte y que la venganza, envidia y rencor es la reacción del pobre de espíritu.
Si me quitas la fuerza, déjame mantener la esperanza.
Si me quitas hoy el éxito, ayúdame a superar el fracaso.
Si yo faltara a la gente, dame el valor para disculparme.
Y si alguien me faltara, dame el valor para perdonarlo.
Ayúdame a creer en mis hermanos y que sus sentimientos son puros.
Señor Si me olvido de ti. Por favor tú no te olvides de mí y ayúdame a Ser feliz…

Ayúdame, Señor, a obtener el fruto espiritual
Que Tú pretendes con esta enfermedad que me has enviado.

Señor Jesús, dame un espíritu fuerte que esté siempre puesto a ayudar, que nunca se canse de darse a los demás y que a ejemplo tuyo sepa siempre consolar y ayudar a quien lo necesite.

Amado Dios

Señor, lleno de confianza en Ti, que sois la misma verdad, me postro a tus pies con un corazón lleno de esperanza, que en este instante eleva una oración con una solicitud muy especial: por favor tómame de la mano y ayúdame a superar mis problemas.

En ocasiones se presentan ante nosotros algunas situaciones difíciles, que ponen a prueba nuestro carácter y nuestra valentía, pero sé que detrás de lo que hoy parece una gran dificultad, pronto se asomará una enorme bendición.

Por mi parte…

 Aunque no comprenda muy bien lo que está pasando en mi vida, en este momento cierro los ojos, respiro hondo y te digo: Amado Dios, sé que todo lo que está sucediendo es parte de tu plan, solo te pido, Dios omnipotente, que me des las herramientas, la sabiduría y la capacidad para salir adelante, en tu poderoso nombre.

 Aunque algún día las cosas no hayan salido como yo esperaba, nunca abandonaré mi fe, pues confío en tu promesa de que siempre habrá un nuevo amanecer lleno de esperanza, que mi victoria puede estar más cerca de lo que imagino y que debo seguir adelante con ilusión, pues las mejores cosas de la vida requieren un esfuerzo.
 Yo seguiré cada día trabajando con amor y con voluntad, haciendo siempre lo mejor que pueda hacer y plantando las semillas de aquella que pronto será mi hermosa cosecha. Porque Tú escuchas mi oración y porque serás Tú quien cuide de mí y me dé la victoria, Amén.
Señor, ayúdame a comprender lo corto que será mi tiempo en la tierra. Ayúdame a comprender que mis días están contados y que mi vida se me escapa de las manos. Muy breve es mi vida. Toda entera no es más que un momento para ti. ¡La existencia humana es como un soplo!
( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

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