El amor no deja marcas
No debería de haber un día para la violencia sobre las mujeres, no debería existir un día dedicado a los que sufren, sin embargo hemos llegado a esto,deberíamos recordar a los hombres que somos las generación de un pueblo, hacerle daño a las mujeres equivale a lastimar al mundo entero.
Nada, absolutamente nada, justifica un maltrato, un mal gesto, una mala palabra. Sin embargo, tristemente nos ocurre con frecuencia que damos validez a las malas palabras y malos gestos de los demás.
Si alguna vez te tratan mal, recuerda que la responsabilidad no es tuya. Recuerda que son ellos los que están errando, los que tienen «algo mal» en su interior. No eres tú. No es tu culpa, tampoco tu responsabilidad
La mejor manera de protegernos ante las personas que nos tratan mal es no admitir ese trato. Los vínculos emocionales son valiosos y debemos cuidarnos, por eso es importante ignorar y alejarnos de las personas que dañan nuestra autoestima.
Si siembran las dudas, el malestar y la desgana, no conviene que sigamos cerca, pues nos envenenarán. Las personas que pretenden dañarnos, no ven en esos momentos más allá de sus intereses, por lo que lo seguirán haciendo si no somos capaces de pararles los pies.
La traición, la frialdad y la prepotencia son puñales afilados que, al clavarse, duelen con intensidad. Sin embargo precisamente lo más doloroso es conocer desconociendo a aquellas personas que te rodearon en un tiempo. Hay personas que acabas descubriendo cuando se muestran de verdad, cuando ya no te necesitan y reflejan su verdadero interés por ti.
Al reconocer que hay personas que nos tratan mal, podremos analizar la situación y anticiparnos a sus reacciones. Por lo tanto, nuestro escudo está conformado por la capacidad de ignorar y de anticipar esas malas palabras o malas acciones.
Hay muchos factores que nos atan a una relación tóxica: Costumbre, soledad, dependencia, miedo e inseguridad, porque comienzan los cargos de conciencia y es de valientes liberarnos. Al principio es difícil pero se puede y un consejo aunque haya hijos, nietos, corta tú de raíz esa relación y que sean ellos los que se busquen, se vean, se amen, en lo que va sanando la herida, porque el tiempo es nuestro mejor aliado.
Siempre hay una manera de hacerlo. Busquen ayuda, apoyo psicológico, empleo una forma de tener dinero propio, lean, vean vídeos, el punto es salir de ese hoyo que ellos cavan para meternos ahí muertas en vida. Nadie te está diciendo que vas a caer en una cama de rosas, tenemos que aprender a ser adultas y a valernos por nosotras mismas. La gran ventaja que ellos tienen es que no nos enseñaron a hacernos cargo de nosotras pero si de los demás. Comienza haciendo contigo lo que harías por los demás. Cuida de ti cómo cuidarías de otros. Ese es un buen comienzo.
Creo que en realidad debería de decir “ NO AGUANTES, NO ESTAS SOLA. BUSCA AYUDA” Miles de mujeres soportan la violencia por qué creen están solas, que nadie las podría entender y mucho menos ayudar. Muchas hasta creen que esa vida es normal. Seamos solidarias unas con otras que la lucha es de todas por todas.
Es mejor enamorarse de una persona que en la mañana te pregunte cómo estás, que te da el buenos días y no se olvida de que estás ahí.
Es mejor enamorarse de una persona que te besa de repente, sin un motivo, para tener cada vez la emoción de un amor que sorprende. Alguien que usa los abrazos en lugar de palabras cuando estás triste, y que, en lugar de los consejos utiliza el latido de su corazón para calmarte.
Es mejor enamorarse de una persona que todo lo que lo rodea le recuerda a ti.
Es mejor enamorarse de una persona que ame tu libertad, tu independencia y que respete tus decisiones.
Es mejor enamorarse de una persona que tenga el mejor olor del universo, lo que reconocerías por todos lados, lo único que solo tú puedes apreciar. Ese olor tan similar a tus emociones. Y sobre todo, si no lo encuentras, ama la vida. Pero no te conformes con un amor mediocre.
El amor no levanta las manos…Te toma de la mano.
(Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)