YA NO TENGO PACIENCIA

La vida pasa

La vida pasa y nada la detiene.
Mi meta en estos momentos es vivir.
Soltar todo, menos mi felicidad
No tengo tiempo para sufrir, porque ya pagué las horas extras que le dediqué a ello.
No tengo tiempo para palabras que quieran hacerme menos, porque no me pertenecen.
Mi enfoque es sonreír, porque ya le dediqué muchas noches al llanto.
Y si aparecen piedras en el camino, las brinco
Y si se atraviesan huracanes, me limpio las inseguridades con la lluvia y aprovecho el viento para avanzar.
La vida pasa y nada la detiene
Soy todo lo que ves, no tengo el tiempo para aparentar
No tengo miedos que me amarren y me priven de la libertad.
Y si caigo nuevamente en el abismo no me asusta, ni me preocupa, ya en un pasado aprendí a volar.
No tengo paciencia para el cinismo, envidias, críticas en exceso y exigencias de cualquier naturaleza.
Perdí la voluntad de agradar a quién no agrado, de amar a quién no me ama y de sonreír para quién no quiere sonreírme.
Ya no dedico un minuto de mi tiempo a quién miente o quiere manipular a mí misma u a otras personas. Decidí no convivir más con la pretensión, hipocresía, lo superficial, la deshonestidad y elogios baratos.
No soporto conflictos y comparaciones.
Creo en un mundo de opuestos y por eso evito personas de carácter rígido e inflexible.
En la amistad me desagrada la falta de lealtad y la traición.
No me llevo nada bien con quién no sabe elogiar o incentivar a las personas.
Las exageraciones me aburren y tengo dificultad en aceptar a quien no gusta de los animales.
Y encima de todo ya no tengo paciencia ninguna para quién no merece mi paciencia.

Ya no me veo…

Ya no me veo contestando cada insulto que me dan.
Ya no me veo escuchando cada queja de la gente alrededor.
Ya no tomo responsabilidades que no me corresponden, ni explico, el por qué no lo hago.
Ya no discuto con la gente para salvar mi honor o mi nombre.
Ya no me veo angustiada por qué alguien deja de hablarme o alguien ya no me quiere en su vida.
Ya no me veo preguntando aquí y allá por algo que quiero saber.
Ya no me veo triste, enojada, frustrada, deprimida o cualquier emoción que baje mi vibración, me enfoco en volver a tomar vuelo para ser quien realmente soy.
Hoy, ya no veo cómo antes, ni siquiera como ayer.
Todos los días, me descubro, me callo y miro dentro de mí.
Ya no me veo caminando por la vida sin luz.
Hoy elegí estar bien. Solté todo aquello que no me deja avanzar libremente.
Hoy elegí estar bien, y el viento me silbo al oído:¡Eres Libre!
Disfruta de la vida cuando las cosas estén sucediendo. No importa si se trata de cosas buenas o cosas malas. Eso significa que estás vivo.
La vida es un hermoso regalo que te llenara de sorpresas, aprende de ellas y disfrutar el vivir.
( Los textos son de autor desconocido, fueron copiados y recontados por Adonis)

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